La ex concejal radical Cristina Coria, estaría presionando con el voto de su mayor contribuyente para definir el aumento de tasas, tensiona la cuerda para poder ganarse ¨caprichosamente¨ un lugar en el Ejecutivo.
El camino lucía allanado para el gobierno en su objetivo de tener la aprobación total del paquete presupuestario, para lo cual solo resta la celebración de la Asamblea de Concejales y Mayores contribuyentes, que deberá avalar el aumento del 45% en las tasas municipales que disponen las ordenanzas Fiscal e Impositiva.
Como es sabido, dicha asamblea tiene una composición que refleja la distribución de las bancas en el HCD. El órgano está compuesto por los 24 ediles y los 24 “mayores contribuyentes” titulares que son elegidos tras un largo proceso administrativo que culmina con una resolución de carácter político: cada bloque elige entre titulares y suplentes al doble de la cantidad de bancas que tiene.
Pero los listados se renuevan en mayo, con lo cual el plenario que se realizará el próximo martes reflejará la composición del año pasado. Y aquí emergería un obstáculo para el gobierno: la ex concejal Cristina Coria. Referenciada en Evolución y opositora a Maximiliano Abad en la última interna partidaria del radicalismo-apoyó a Gustavo Posse y Martín Loustaeu-, la dirigente estaría presionando con un potencial voto negativo de su mayor contribuyente para trabar el aumento de tasas.
Conocida es la obsesión de Coria con el Emtur, dependencia a la que siempre buscó ingresar, aunque hoy luce casi imposible dada la confirmación de sus autoridades: el lilito Bernardo Martín como presidente y Carla Ardanaz en calidad de vice. Según supo La Tecla, incluso la ex edil ya habría sido tentada con un cargo en el gobierno, pero habría desistido, decidida a contar con algo mejor.
De todos modos, en el gobierno confían en zanjar las diferencias y que, a pesar de todo, se concrete el aumento de tasas el próximo martes.
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