Desde el Panal deslizan que la oposición dura y amigable no llegará a juntar los dos tercios para reinstalar la ley de movilidad jubilatoria cuyo veto presidencial hoy aparecerá publicado en el Boletín Oficial de la Nación. En el bloque de los cordobesistas, la posición es ir por la restitución, aunque lograr el quórum para sesionar, aun sin los votos para aprobar, es el mejor escenario que tiene el cordobesismo.
Por Bettina Marengo.
El bloque Encuentro Federal donde están los diputados nacionales que responden al gobernador Martín Llaryora se reunirá mañana para definir su postura ante el veto presidencial completo que dispuso Javier Milei sobre la ley de movilidad jubilatoria. La posición de los cordobesistas en la cámara baja es insistir con los dos tercios necesarios para restituir la ley previsional porque entienden que este tema y el financiamiento educativo pueden ser “los dos grandes errores” del libertario en su afán de mantener el déficit cero en las cuentas nacionales. Errores que tendrán costos electorales a mediano plazo, evalúan.
Sin embargo, desde el Panal dan por hecho que Milei podrá juntar, entre los bloques de La Libertad Avanza, el PRO y algunos aliados, los 86 votos que necesita en Diputados para evitar la reinstalación de la ley, y que en todo caso la discusión es política pero no tendrá mayores efectos. “No va a pasar nada”, se sinceran las voces más pragmáticas del entorno llaryorista, quizás temiendo que el sanfrancisqueño tenga que tomar una definición en el tema previsional si crece el tira y afloje entre el oficialismo y la oposición amigable y el jefe de la Casa Rosada lo llama para que juegue a favor de la “gobernabilidad”. Para Llaryora sería una disyuntiva que querría evitar por muchos motivos, entre ellos, la capacidad de daño que tiene el libertario cuando alguien se le opone y el peligro de quedar, a los ojos del electorado cordobés, cerca del kirchnerismo en el Congreso. En ese escenario, los schiarettistas/llaryoristas apuestan a una victoria simbólica sobre el libertario, sin costos para el mediterráneo. Consideran que lograr quórum para una sesión donde se trate otra vez la movilidad jubilatoria, aunque no estén los dos tercios para restituir, sería un triunfo político que dejaría expuesto a Milei.
Llaryora viene dando señales de acompañamiento a Milei en varios puntos: desde el RIGI de bajo impacto en Cordoba, al blanqueo de capitales aprobado en ley Bases, a lo que se suma el bajo nivel de confrontación con Nación en casi todos los temas centrales. La excepción es el reclamo políticamente aceptable de la “vaca viva” para la Región Centro: baja de las retenciones y nueva ley de biocombustibles. Es entendible para el oficialismo esa bandera, y tanto el jefe de Estado como el ministro Luis Caputo están al menos discursivamente a favor de la baja de impuestos. En los temas peliagudos, el bloque cordobesita se comportó dividido, como en el caso del rechazo al DNU 656 de los fondos para la Side, donde Carlos Gutiérrez, Alejandra Torres e Ignacio García Aresca no bajaron al recinto y sí lo hicieron Natalia de la Sota y Juan Brugge. Le llaman “estrategia intra legislativa”.
El “gurú” del cordobesismo en temas jubilatorios, Osvaldo Giordano, posible candidato a diputado de Hacemos Unidos por Córdoba, bajó la línea de que la ley es buena en su aspecto de movilidad y evitaría juicios futuros, pero “irrelevante” en relación al pago de las deudas con las Cajas de jubilaciones no transferidas, como la de Córdoba. “No aporta nada”, les dijo. Eso tranquiliza.
En el medio de esta rosca que recién empieza está la discusión por el Presupuesto 2025 que el Ejecutivo tiene que presentar antes del 15 de este mes y que, dado los antecedentes del “no hay plata”, no tiene visos de ser muy generoso para con los gobernadores. De hecho, en la reunión que Milei mantuvo hace unos días con legisladores propios y dialoguistas, adelantó que el proyecto será con déficit cero. Llaryora está obviamente muy interesado en el diseño presupuestario (de eso también depende su propio Presupuesto provincial) y viene hablando con Caputo, con el cual tejió buena relación. La ley marco va a determinar hasta dónde llegará el ajuste en los distritos y si la Nación contempla, por ejemplo, pagar las deudas con las provincias por el déficit de las Cajas.
El veto aparecerá publicado en el Boletín Oficial de hoy y no corren plazos perentorios para restituir la ley, según dicta la Constitución Nacional. En el bloque que conduce Miguel Angel Pichetto creen que no hay que mostrar las cartas tan rápido y que hay que dejar correr los días para que el presidente pague el costo político por el veto de una ley que implica una mejora del 8,1% del haber jubilatorio para comenzar los más de 20 puntos de inflación de enero que licuó los ingresos.
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