El Colegio de Abogados de Córdoba y algunos magistrados cuestionaron la decisión del Ministerio de Justicia de la Nación 
de impulsar la supresión de la feria judicial de enero y de julio. A su vez, el gremio judicial provincial rechazó enfáticamente la medida y consideró que el cambio “esconde un proyecto de flexibilización laboral”.

Oscar Echegaray, presidente del Colegio de Abogados de Córdoba, opinó que la medida “no es fundamental para mejorar los tiempos de la Justicia”. Tras remarcar que “necesariamente hay que mejorar los tiempos del servicio de Justicia” a nivel nacional y provincial, el directivo consideró que ese cambio pasa “por otras cuestiones”. Y mencionó la modificación de los procedimientos judiciales y fundamentalmente la asignación de partidas necesarias para tener más juzgados.

Advirtió que la supresión de la feria perjudica a los abogados porque los jueces no se van a quedar sin vacaciones. Dijo que el abogado que no pertenezca a un estudio o no tenga socios deberá asociarse para las causas que tramite. Si no, no podrá tener vacaciones debido a que “es imposible irse y que sigan corriendo los tiempos procesales”. Remarcó que hay muchos letrados que trabajan individualmente y se verán perjudicados.

Como alternativa para no 
suprimir la feria, dijo que se podría prorrogar el horario de atención judicial o habilitar la suspensión de los plazos procesales para los abogados que requieran vacaciones, como lo contempla un proyecto de ley que está en el Congreso para los casos de enfermedad o de accidente.

Por su parte, el integrante de la Cámara Federal de Córdoba, Roberto Rueda, opinó que el “tema merece una amplia discusión porque no se trata de defender un privilegio si no ver qué es lo más razonable en cuanto a los fundamentos para que continúe la feria, sea suprimida o morigerada”.

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“Si se está presentando como la defensa de un privilegio, empezamos mal la cuestión”, objetó.

Consideró que los abogados 
serían los más afectados, ya que los magistrados igualmente tendrán sus vacaciones.

En la misma sintonía que Rueda, el fiscal provincial Enrique Gavier remarcó que “el sentido de la feria es unificar la suspensión de todos los plazos procesales en un mes, y su supresión perjudicaría fundamentalmente a los abogados, ya que no trabajan en relación de dependencia”.

Federico Cortelletti, titular del gremio judicial provincial, fue el más crítico. “Defendemos derechos laborales y no se pueden pasar por encima derechos adquiridos sin sentarse a discutirlos en convención colectiva”, subrayó.“La feria es una forma de organizar las vacaciones, y se podría buscar otra”, admitió.

Consideró que el proyecto de reforma judicial nacional “tiene sus partes buenas”, pero también apunta a “promover un clima de negocios que quieren instalar en favor de las corporaciones”.

Actividades en la Justicia

45 días. Es lo que dura hoy la feria judicial. Los tribunales permanecen cerrados durante todo enero y 15 días en julio.

6 horas. Es lo que dura la jornada laboral, de un solo turno.

132 días al año. Según el Foro de Estudios sobre la Administración de Justicia (Fores), el sistema judicial sólo funciona 190 días al año si se descuentan feriados, asuetos y recesos. Si se considera que la jornada es de 6 horas, los días proporcionales realmente trabajados caen a 132 al año.