La acción comenzará a las 11.30, con Berlocq vs. Seppi; después, Mónaco vs. Fognini
El Complejo Panamericano marplatense no le provoca buenos recuerdos al tenis nacional. En uno de los escenarios del predio, en el Polideportivo, se perdió la final de la Davis 2008 ante España luego de diversos focos de conflicto entre jugadores, dirigentes y cuerpo técnico. Aquella fue una pesadilla que difícilmente cicatrice; quizás se sane sólo con la obtención de la Ensaladera, esa misma que Italia conquistó en 1976 frente a Chile, en un equipo que integraba Corrado Barazzutti, el actual capitán.
A sólo algunos metros del Polideportivo, en el Patinódromo se montó especialmente una cancha sobre polvo de ladrillo en la que seguramente los argentinos intentarán que resulte lo más lenta posible. Aunque los italianos también son fuertes sobre arcilla. "Fognini es muy talentoso, pero me hace acordar a Gaudio. Ojalá que en los partidos tenga esas lagunas. Veo una serie muy pareja, cerrada, que se va a definir con lo justo, en el último momento. Es importante la localía, necesitamos apoyo. Este equipo es humilde, sabe que tiene que luchar mucho", expresó Jaite, que comenzará su tercer año como capitán. Barazzutti, asimismo, añadió: "Observo un partido muy equilibrado. Jugar en la Argentina es muy difícil, el público es caliente. Tenemos jugadores en buenas condiciones, tendremos que tener mucha paciencia. Se verá".
"No cambia nada, solamente los tiempos, si duermo más o menos. Me enorgullece estar acá y tengo mucha ilusión", dijo Charly Berlocq, la raqueta que el año pasado encontró en la Copa Davis un trampolín para su carrera, logrando el quinto punto frente a Francia en los cuartos de final (ante Gilles Simon) y fundiendo el motor de Philipp Kohlschreiber en la victoria 5-0 de la 1» rueda. El Titán de Chascomús abrirá hoy, como singlista número 1 por primera vez, la serie ante Seppi, a quien sólo enfrentó el año pasado sobre el césped de Eastbourne y perdió. Luego, será Pico Mónaco el que, en principio, deberá bailar con la más fea, ya que buscará ganar el segundo punto frente a Fognini, un jugador talentoso que desde hace un tiempo corrigió sus problemas de conducta y contrató a un entrenador que sacó lo mejor de su potencial (José Perlas, ex de Guillermo Coria). El tandilense, pese a que tuvo un pobre 2013 afectado por problemas en su muñeca derecha, ostenta un récord positivo ante el italiano (3-0, dos sobre cemento y uno en polvo de ladrillo) y auspicioso en partidos individuales de la Davis sobre superficies lentas: 11-4. "Tendré que tener paciencia para sentirme bien con mis golpes, cómodo en mi juego y poder explotar lo bien que trabajé en la pretemporada. No puedo dejarlo pensar, porque Fabio es peligroso", analizó Mónaco, que tiene una amistosa relación con la mejor raqueta italiana, tanto es así que el domingo pasado observaron juntos el clásico platense entre Estudiantes y Gimnasia, y se prometieron ir al estadio pasado mañana si la serie termina en un tiempo prudencial. Mañana se disputará el dobles, en el que la Argentina presentará a Horacio Zeballos y Eduardo Schwank; allí, los visitantes presentarían a Fognini con Simone Bolelli. Pero todavía falta mucho y la jornada de hoy será trascendente.
El italiano Nicola Pietrangeli, bicampeón de Roland Garros y el que más partidos disputó por la Ensaladera (164), se encuentra en Mar del Plata como embajador de la Federación italiana. Y, a los 80 años, dejó una frase significativa durante la cena oficial: "La Copa Davis es distinta a todo. Hay jugadores de tenis y jugadores de Davis". Ante un marco del que recién se podrán sacar conclusiones hoy (la venta de entradas era muy pobre, pero tras una promoción de la TV local mejoró significativamente), la Argentina empezará a buscar, una vez más y como primer paso, la permanencia en la elite..
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