Los últimos meses del 2013 representaron un tiempo convulsionado para la Universidad Nacional de Jujuy, por la constante solicitud de los estudiantes que llegaron a tomar las instalaciones para lograr la construcción de un nuevo comedor universitario centralizado gratuito. Si bien hasta hace algunas semanas parecía que el tema había quedado "en la nada", se anunció desde la casa de altos estudios que en febrero se inaugurará el nuevo comedor, cuestión que desató nuevas respuestas de diferentes sectores.

El conflicto por el comedor se desató a mediados del mes de noviembre, cuando la sociedad tomó conocimiento de que estudiantes de diferentes facultades tomaron el edificio del Rectorado. Los alumnos en esos momentos plantearon por primera vez de manera masiva que era necesario de manera urgente que un mayor porcentaje del presupuesto del corriente año sea destinado al funcionamiento de un comedor universitario. El reclamo surgió luego de realizada la última sesión ordinaria del Consejo Superior, en el que según comentaron los estudiantes, no se les permitió una discusión "democrática" al momento de definir cuáles son las necesidades prioritarias para el 2014.

Según el grupo de la "toma" de la Unju en el mes de noviembre se puntualizó en la mencionada sesión que del total del presupuesto para el corriente año, sólo el 0.5 % sería destinado a 500 becas destinadas a viandas brindadas en los comedores de la universidad, por lo que los estudiantes solicitaron terminar con el sistema de subsidios y crear un comedor universitario centralizado y gratuito. Luego de los planteos y la ocupación del principal edificio de la Unju, finalmente la primer semana de diciembre se llegó a un acuerdo parcial. En un encuentro al que asistieron numerosos estudiantes y miembros del Consejo Superior y el mismo rector Enrique Arnau, se propuso formalmente instalar el comedor en el antiguo espacio que cumplía las mismas funciones hace ocho años, en la facultad de Ciencias Agrarias.

A pesar de que en ese momento los estudiantes aceptaron la propuesta de un comedor centralizado en calle Alberdi, Arnau manifestó en esos momentos que se encontraban disponibles 2 millones y medio destinados al funcionamiento de este sector , mientras que los alumnos plantearon que el monto debería ascender a los 5 millones. Otra de las diferencias que tuvieron fue que Arnau manifestó que la comisión estudiantil que se encuentre a cargo del comedor esté conformada por un grupo representativo de estudiantes de todas las facultades de la Unju, mientras que los alumnos no estuvieron de acuerdo con este punto debido a que temieron que se incorpore a la comisión alumnos que sigan la línea política que encabeza el rector, por lo que la toma del edifico continuó.

Finalmente el 6 de diciembre último en la sede de Adiunju, los estudiantes decidieron levantar la toma del Rectorado y aceptar la propuesta del rector con el objetivo de iniciar inmediatamente las gestiones para poner en marcha del comedor universitario en la Facultad de Ciencias Agrarias, aunque aclararon que seguían en desacuerdo con Arnau. La sorpresa de los estudiantes fue que el 18 de diciembre, durante la última sesión extraordinaria del Conejo Superior, no se aprobó lo acordado con el grupo de "la toma", es decir la creación de un comedor universitario centralizado y gratuito ni tampoco las partidas que se le asignará en el presupuesto. Según los estudiantes en aquel momento se planteó instalar el comedor en un espacio de la facultad de Ciencias Económicas y seguir beneficiando con viandas a través de becas y diferentes programas, lo que beneficiaría sólo a una escasa cantidad de estudiantes.

En este sentido los delegados de los alumnos de la Unju que participaron de la toma del rectorado brindaron sus últimas declaraciones el año pasado indicando que "seguirán en la lucha" debido a que Arnau se comprometió a que estudiantes ingresantes y del interior no pagarían al utilizar el espacio, mientras que durante la última sesión del Consejo Superior Arnau les informó que el comedor seguirá dependiendo de un sistema de becas. Además el grupo universitario se opuso a la licitación del nuevo comedor -cuestión anunciada por el rector en la última reunión- temiendo que se transforme en un "negocio lucrativo" para la universidad.