CARACAS.- En una nueva fase de la ofensiva chavista, la Asamblea Constituyente decretó anoche iniciar un juicio por "traición a la patria" contra figuras de la oposición, señaladas de promover las sanciones financieras de Estados Unidos contra Venezuela.

La Asamblea Constituyente, dotada de amplios poderes de acción sobre el conjunto de las instituciones venezolanas, aprobó por unanimidad de sus 545 miembros un decreto para iniciar "conjuntamente con los órganos del Estado un juicio histórico por traición a la patria contra los que estén involucrados en la promoción de estas inmorales acciones contra los intereses del pueblo venezolano".

Aunque el decreto no menciona a nadie en particular, los asambleístas que intervinieron en la sesión acusaron a la dirigencia opositora, principalmente al presidente del Parlamento, Julio Borges, y a su vicepresidente, Freddy Guevara. "Sabemos que Guevara es un delincuente y tiene que pagar, que Borges es otro delincuente que tiene pagar. Ellos no tienen patria", dijo la asambleísta Iris Varela, entre otras acusaciones de los líderes disidentes.

La Constituyente decidió además solicitar a los órganos del Estado "el inicio inmediato de las investigaciones y procesos respectivos para determinar la responsabilidad y las acciones correspondientes" contra los acusados. Según el decreto, el juicio fue dispuesto tras un llamado del presidente Nicolás Maduro, que señaló a Borges como principal responsable de impulsar las sanciones que prohíben a los bancos de Estados Unidos hacer transacciones en bonos de deuda del gobierno de Venezuela y de la petrolera estatal Pdvsa, lo que se estima que limitará severamente la capacidad de financiamiento del chavismo.

"¿Los ciudadanos que han hecho esto son venezolanos? Pareciera que no, pero aquí está este decreto. Si son venezolanos son traidores a la patria y debería aplicarse todo el peso de la ley", dijo el líder del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Diosdado Cabello, sin dar otros detalles.

Durante la sesión de la Constituyente también se despachó el asambleísta Adán Chávez, hermano mayor del fallecido presidente Hugo Chávez, que solicitó entre los aplausos de sus colegas el enjuiciamiento y "castigo ejemplarizante" para las personas que "promovieron las sanciones".

El consenso sin fisuras de la Asamblea Constituyente, al igual que todas las determinaciones tomadas desde su instalación, no sorprendió a la dirigencia opositora. Consultado sobre si se consideraba un "traidor a la patria", Borges expresó a la prensa que lo que hacen los legisladores de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), mayoritaria en el Parlamento, es "defender la libertad en Venezuela, los derechos humanos y la democracia".

"Creo que traición a la patria es robarse el dinero de los venezolanos", añadió. Borges envió este año más de una docena de cartas a bancos internacionales para advertirles sobre el riesgo que enfrentaría su reputación si ayudaban al gobierno de Maduro con financiamientos y adquisiciones de bonos, lo que lo puso en la mira del chavismo en la sesión de ayer a la hora de buscar chivos expiatorios y volver a golpear contra la vapuleada oposición.

Además del arrinconamiento político y judicial, el oficialismo emprendió una violenta represión contra la ola de protestas opositoras iniciada a principios de abril.

Emmanuel Macron

Presidente de Francia

"[En Venezuela se está estableciendo] una dictadura que intenta sobrevivir al precio de un costo humano sin precedentes"

Agencias AFP y ANSA