En diálogo con InfoMiBA, la diputado provincial por el frente Avanza Libertad, habló sobre sus proyectos en la Legislatura, el acuerdo con el FMI, los femicidios y la gestión actual que gobierna.
Acerca de qué temas estará tomando, dijo: “Actualmente estoy trabajando sobre algunos pedidos de informe más respecto de las consecuencias que ha tenido el cierre de los servicios de salud durante casi dos años.”
“Hoy en la provincia de Buenos de Aires, por bajada ministerial, tanto el sector público como el sector privado y el de las obras sociales, siguen atendiendo bajo protocolos que deberían estar caducos. Esto es gravísimo. Y te da la pauta de la falta de adecuación oportuna a las distintas realidades que propicia el Estado; generando un atraso equivalente y aún peor, en las necesidades de la gente que viene siendo postergada por diversos motivos: falta de atención, directamente, acceso tardío a diagnósticos determinados, empeoramiento de la condición de enfermedad preexistente, etc”.
Y continuó: “A eso hay que añadir el oscurantismo que rodea cualquier atisbo de conocer la situación sanitaria a través de los datos. Por un lado, te cuentan que con las vacunas estamos bien, y vamos mejor, pero no hay estadísticas publicadas basadas en ninguna evidencia para sostener estas premisas”.
“Entonces, ¿cómo comprobarlo? Hoy como sociedad no tenemos acceso a ninguna herramienta de control sobre los funcionarios del Ejecutivo. Básicamente, no sabemos ni qué están haciendo, ni con qué resultados. Es más, te invito a buscar en cualquier sitio oficial el organigrama de cada dependencia pública y hacer un seguimiento de cada una de ellas. De ahí que, entendiendo que sin transparencia, el control de la gestión es impracticable, el primer paso es acceder libremente a la información que necesitamos para legislar de manera adecuada, y a por ello vamos”, aseguró la legisladora.
Sobre el acuerdo con el FMI, expresó: “Me parece que antes de responder sobre el acuerdo, hay una situación anterior y es por qué tenemos como país, otra vez, la necesidad de ir a un acuerdo. Y, la respuesta es muy simple: porque tenemos una deuda que debemos pagar para poder salir adelante. La lógica que debiera regir las relaciones de cualquier sociedad de normales, es la de Causa y Efecto.”
“En esa lógica, si no queremos pagar, no nos endeudemos. ¿Cómo evitamos caer eternamente en endeudamiento tras endeudamiento? Bueno, eso es algo que mis referentes expresan y explican muy bien, y se podría sintetizar en bajar el gasto público. Este gasto desmesurado se ve reflejado en una sociedad cada vez más empobrecida, desesperanzada y destruida, donde el sueño posible es la supervivencia y no la vida como proyecto en sí misma”, comentó.
En cuanto a qué piensa sobre la alta cantidad de femicidios que hay, dijo: “Creo que la violencia a la que estamos acostumbrados, sea en forma de robos, expropiaciones, homicidios o el delito que sea, es un espejo de la decadencia de nuestra dirigencia política, en todo sentido. Como todo delito implica en alguna medida, un abuso de poder, creo que, el Estado, a través de sus funcionarios, se ha constituido en un pésimo modelo de ejemplaridad, para el resto de los ciudadanos.”
Y agregó: “Ellos han propiciado el estado de privilegio por encima del estado de derecho que siempre dijeron defender, haciendo de la vida en éste país, un verdadero infierno plagado de todo tipo de desviaciones, injusticias y males. Esta realidad no va a cambiar abajo, hasta que cambie arriba. La buena noticia es que la irrupción de quienes defendemos la libertad en distintos ámbitos legislativos de la nación, la ciudad y la provincia, venimos a poner en valor la igualdad ante la ley, requisito sine qua non para que el estado de privilegio promovido por la política tradicional, se caiga”.
Y en cuanto a cómo cree que encara este tema el Gobierno nacional y provincial, comentó: “De manera deficiente y sesgada, como todo lo que encaran. Abriendo dependencias para inventar cargos que nunca resuelven nada, porque la decadencia estructural nuestra no se resuelve haciendo eje en el Estado, sino en el ciudadano. Su vida, sus proyectos, sus intereses y sus demandas”.
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