El municipio de Río Gallegos –luego de tres años de idas y vueltas- retomará la obra de las 250 viviendas financiadas por el Gobierno nacional e iniciadas cuando aún era intendente Raúl Cantín, pero que en los últimos años habían quedado en absoluto abandono.

Las viviendas fueron obtenidas en el marco del programa “Más Cerca, Más Municipio, Mejor País, Más Patria”, del Gobierno nacional anterior, cuya apertura de sobres se hizo en 2013 a un valor de entonces de 90 millones de pesos. Pero el derrotero fue largo y dificultoso y hasta parecía que las viviendas iban a quedar en el olvido.   

Licitaciones, precios y renegociación- En total son alrededor de 29 las hectáreas de una obra que debían realizar las firmas adjudicatarias Acri Construcciones S.A., Proalsa SRL, Permaco SRL y Chimen Aike SA. Precisamente en su momento se destacó la importancia que sean varias las empresas adjudicatarias, lo que le daba trasparencia al proceso.

Solicitado por la Dirección de Obras Públicas del municipio local, las 250 viviendas fueron divididas en 12 licitaciones de 20 viviendas cada una y una licitación de 10 viviendas. Para el grupo de 20 viviendas, el presupuesto oficial era de $ 7.286.250 (cada licitación); mientras que para la licitación pública Nº 41 por diez viviendas, el presupuesto oficial fue de $ 3.661.290; siempre a precio de entonces.

“Solucionamos con el área de Vivienda la continuidad de las 250 casas”, y ahora “nos queda hablar con las empresas, informar el nuevo mecanismo de redeterminación de precios y esperar que todas quieran continuar con la obra que tenían o negociar entre ellas cuáles siguen”, indicó el domingo pasado el intendente Roberto Giubetich.

Avance a medias- Vale destacar que el proyecto había avanzado luego que desde la entonces Agencia de Administración de Bienes del Estado –AABE- otorgaran tierras del Estado Nacional al municipio, con el objetivo de llevar adelante la construcción de las 250 viviendas.

Luego de la apertura de la licitación, realizada en agosto del 2013 en el Teatro Municipal de Río Gallegos, en febrero del 2014 se empezaron a colocar los obradores para empezar con las viviendas. Quien hizo los anuncios fue el entonces secretario de Obras Públicas, José Zavaley. 

Pero luego de la apertura de calles y de la colocación de algunos cimientos, las obras se paralizaron sin que se precisara en detalle si se debía al atraso de los pagos de las certificaciones o a la demora de la documentación que debía presentar el municipio.

El tema formó parte de las acusaciones realizadas por la oposición local al intendente Cantín, además de las denuncias por la obra del polideportivo de calle Félix Ríquez y Doctor Filippo, obra que nunca vio la luz. De hecho, a mediados de marzo de este año la Auditoría General de la Nación (AGN) hizo saber al municipio de Río Gallegos que había seleccionado a las obras del Natatorio Municipal (valor inicial $ 40.795.427,15) y a la del Polideportivo de la ciudad (valor inicial de $ 23.503.182,75) para someterlas a una auditoría ordenada por el Gobierno de Mauricio Macri.

Según relató entonces TiempoSur, la segunda obra nunca se ejecutó y además, no consta documentación alguna dentro del municipio en donde tampoco hubo reserva de terreno alguna para su ejecución. La sospecha de la AGN es si acaso, la obra se pagó. Esa obra estaba dentro del paquete de anuncios junto a las 250 viviendas.