El detalle de gastos de municipio del año pasado recibió el visto bueno de las 14 manos presentes del oficialismo. Los ocho concejales de la oposición votaron en contra.
En el marco de la primera sesión especial de este año, y de manera presencial, el pasado jueves 1° de octubre, 22 concejales (las ‘cambiemitas’ Jazmín Sáenz y Rosario Cassaro estuvieron ausentes) trataron la Rendición de Cuentas de la gestión del 2019 a cargo del intendente, Jorge Macri.
Sin mayores sorpresas, la rendición obtuvo 14 votos por la afirmativa (todos del bloque de Juntos por el Cambio) y ocho negativos del bloque del Frente de Todos y, por su parte, el edil Marcelo Chocarro.
El miembro informante por el oficialismo, Diego Enrich, resaltó el buen manejo de los fondos por parte del municipio que le permitió, en el actual contexto de pandemia, que haya dinero e infraestructura para el «distrito siga funcionando».
Entre las obras más destacadas por el bloque de Juntos por el Cambio se desatacaron la maternidad Santa Rosa, la tercera etapa del geriátrico municipal; las becas a familias de alumnos; y la inversión en tecnología dispuesta a combatir la inseguridad.
El miembro informante por la minoría, Joaquín Noya (Frente de Todos-Movimiento Evita) señaló en el recinto, y luego a través de sus redes sociales, las principales críticas mediante las cuales rechazaron la Rendición de Cuentas 2019.
Por un lado, el sistema de recolección de residuos a cargo de Transporte Olivos. «Hace más 10 años está sin licitación», indicó Noya. De igual modo con los puestos de comida en el Vial Costero lo que implica, según detalló «pagan menos al municipio en concepto de alquiler por el uso de un espacio público».
A su vez, la presunta existencia de funcionarios municipales como proveedores de la Municipalidad a pesar de la incompatibilidad de funciones.
En tanto, el dirigente del Movimiento Evita también criticó que se continúe cobrando la «Tasa Vial» señalando que se trata de «un impuesto inconstitucional» y que se está «cobrando dos veces».
Por último, criticó la subejecución en áreas como seguridad, educación, obra pública y cultura por un valor de $332 millones al mismo tiempo una subestimación de por encima del 20% (de $8 mil millones a $10 millones) en cual hubo varios redireccionamientos de partidas.
Comentá la nota