La reunión se produjo a pedido de los damnificados con el presidente del Concejo, Miguel Zamarini, autor de una iniciativa de declaración que se aprobará mañana y remitirá posteriormente a Tribunales, la vicepresidenta del cuerpo, Norma López, la titular de la Comisión de Derechos Humanos, María Eugenia Schmuck y el presidente de la bancada de Unión PRO, Rodrigo López Molina.

El cónclave giró en torno a la preocupación de ambas partes por el fallo del juez Gustavo Pérez Urrechu, que dictó la prescripción de la causa judicial, que fuera debidamente apelada por la fiscal Ana Rabín y hoy quedó en manos de la Cámara de Apelaciones.

En el marco de la reunión, Celia Haiek, hermana de María Celeste y Felipe Caruso, papá de Daniela, denunciaron que el pedido de captura de Sebastián Pira fue adulterado en su momento, lo que, según su valoración, le posibilitó salir del país y recorrer el mundo sin inconvenientes.

“Tenemos en nuestro poder el pedido de captura que figura en la Aduana donde el segundo nombre de Sebastián Pira figuraba como Hugo y no Rodrigo, que es el real. Indudablemente esta es una irregularidad muy grave que ha cooperado para que se mantenga prófugo durante 17 años”, explicó Celia Haiek.

“Si la Fiscalía apeló el fallo del juez, nosotros como concejales también podemos permitirnos tener dudas respecto a la prescripción de la causa. No hay que olvidarse que estamos ante uno de los casos de impunidad más graves que se recuerde en la ciudad de Rosario”, expresaron los concejales presentes en la reunión.

“Los 17 años de Pira como prófugo muestra una enorme deuda para con la ciudadanía de Rosario. Nosotros no nos inmiscuimos en la labor de la Justicia, pero sí tenemos derecho a expresar nuestra preocupación a que la investigación por un homicidio tan grave pueda quedar en la nada”, añadieron.

Por su parte, Felipe Caruso, padre de Daniela, remarcó: “La solidaridad que recibimos por parte de los rosarinos es encomiable y esta muestra del Concejo es una más. El “no” ya lo tenemos. Si logramos un “sí” y evitamos la prescripción, será algo muy valioso no sólo para nosotros sino para sentar un precedente y quienes cometan estos delitos sepan que lo tienen que pagar”.

“En el sistema judicial y policial hubo facilidades para permitir que, durante todo este tiempo, y en cada una de las ocasiones que se intentó localizarlo, Pira pueda desaparecer”, añadieron los familiares de Caruso y Haiek.

Vale recordar que, el 2 de marzo de 1997, Sebastián Pira atropelló y mató a María Celeste Haiek, de 21 años y Daniela Caruso, de 16, a quien arrastró cien metros en el capó de su vehículo para luego frenar bruscamente y pisarla con su Ford Galaxy.