En razón de los riesgos que genera la proliferación de camiones en zonas semi residenciales, tal cual lo demostró el violento accidente de un Ford K el pasado sábado, el concejal justicialista, Raúl Moreyra, señaló que “es un tema que se viene debatiendo desde largo tiempo y que ha recrudecido por la falta de los controles necesarios desde el municipio, y con vecinos que se ven afectados en el barrio Los Alamos, barrio Camioneros, donde está la fábrica Río Chico, y los problemas graves que tienen en la conflictividad permanente entre la parte residencial con las fábricas circundantes o empresas de transporte el caso de Vesprini con el barrio Telkien”

“La única alternativa viable hoy es que el municipio a través de la Dirección Inspección General haga el trabajo que le corresponde y se realicen controles periódicos del movimiento de camiones, fijando además señalización necesaria con horarios que ya están normados por ordenanza, además de los carteles indicativos que también comprende la norma vigente y no están”, reclamó.

“El municipio no se pone a hacer el trabajo de control y los problemas los plantean vecinos y camioneros, que poco tiempo atrás fueron multados, cuando no se les marca con la cartelería por donde pueden circular o donde estacionar”, esgrimió el edil, quien resaltó, “la solución definitiva es el parador de camiones y nosotros renegamos permanentemente de tener que enviar pedidos de informes y resoluciones al municipio para que informe de que forma está trabajando, pero en la práctica no se hizo nada”, dijo respecto de ese proyecto.

“Hay pedidos de empresas como Logística Trejo para que les autoricemos o les den un predio para ubicar equipos en la extensión del parque industrial, y creemos que el municipio tiene todos los resortes para dar una solución a la problemática, pero no escuchan los problemas de la gente que termina acudiendo al Concejo Deliberante”, lamentó Moreira finalmente.