Del Valle recomendó abstenerse del uso de los mismos a fin de evitar accidentes y multas, cuyo valor va de 200 a 500 litros de nafta especial.

Cabe recordar que a fines del año pasado, el Concejo Deliberante dorreguense decidió prohibir la comercialización, tenencia, uso, manipulación, depósito, circulación y transporte de elementos de pirotecnia, aunque permitirá la utilización de fuegos artificiales en algunas celebraciones de interés general, previa autorización municipal; en este caso, deberán ser manipulados por personas especializadas, en áreas autorizadas.

De esta manera, el cuerpo legislativo decidió hacer lugar al pedido de prohibición que había efectuado el refugio de mascotas Patitas. La nueva ordenanza fue elaborada por el bloque de concejales de la UCR, que tiene la mayoría, mientras que la bancada de Juntos por Dorrego elaboró un dictamen propio porque pretendía que la prohibición fuera total, sin excepciones.

En este sentido, el edil vecinalista Hugo Segurola había dicho que más allá de la diferencia de “matices”, ambos bloques trabajaron con responsabilidad para hacer valer el interés general por encima de las conveniencias particulares. Además, consideró que luego de la aprobación de la nueva normativa, será el Ejecutivo municipal el encargado de hacerla cumplir.

La flamante ordenanza considera pirotecnia a la técnica de fabricación y utilización de materiales explosivos como cohetes, petardos, rompe portones, bombas de estruendo, cañas voladoras, luces de bengala, fuegos de artificio y cualquier otro elemento similar de carácter pirotécnico que produzca combustión.

“Son ampliamente difundidos los riesgos que trae aparejado el uso de pirotecnia en forma irregular, que alcanza a animales y personas, pudiendo producir graves lesiones, quemaduras y hasta la muerte, además de provocar grandes gastos materiales producto de incendios ocasionales por el uso indiscriminado de estos artefactos”, había explicado oportunamente la edil Cecilia Alvarez (UCR).