Fracasó el inicio de la discusión salarial porque el ministro de Educación no tuvo respuestas para los reclamos que presentaron los gremialistas, quienes calificaron a la reunión «sin avances». Pasaron a cuarto intermedio para el 27.
La bronca de los gremios docentes de la provincia se vuelve a palpar de cara al inicio del ciclo lectivo como consecuencia de la apatía gubernamental, que no ofrece garantías en razón de la falta de iniciativa de un mandatario que transita sus estertores políticos.
El ministro de Educación Sergio Soto intentó generar un espacio de diálogo en el marco del primer encuentro de paritarias, pero la realidad es que los dirigentes sindicales no confían en las propuestas oficiales dada la escasa predisposición al diálogo del gobernador suplente Juan Bacileff Ivanoff. La reunión pasó a un cuarto intermedio para la semana que viene: la cita será el martes 27, a las 18, pero el titular de la cartera educativa ya adelantó: «En honor a la responsabilidad, no prometerá lo que no pueda cumplir». (Ver cuadro aparte)
Bacileff terminó el año pasado con un nuevo récord de días sin clases, mientras que los gremios estatales advirtieron que no cederían a las pretensiones de una gestión que le quitó a los empleados públicos el clima de diálogo al que se habían acostumbrado en tiempos de Coqui Capitanich.
El secretario general de Federación Sitech, Eduardo Mijno, pintó un panorama de las negociaciones al admitir que «las expectativas con que encaramos esta instancia son muy limitadas, dado que este tipo de convocatorias tempraneras son una estrategia de años».
«Nos convocan para enero, nos ponemos a hablar, pero sin definir los números y después entramos en las definiciones de fondo que nosotros no negociamos», sostuvo Mijno, para quien la oportunidad de dialogar en tiempos preliminares no significa que vayan a cesar en sus reclamos de fondo, en especial el reintegro de los descuentos salariales aplicados a los docentes que en 2014 se plegaron a los paros convocados a lo largo del año.
Otra de las exigencias que plantean los gremios educativos tiene que ver con los ingresos que recibió la provincia en el ejercicio fiscal pasado. El titular de Federación Sitech recordó que a lo largo del año la provincia percibió una mejora de coparticipación del 37%: «Tendrán que explicarnos por qué a los docentes les otorgaron un aumento del 25% siendo que la Nación envió recursos por encima de esas mejoras».
Quizás porque Utre-Ctera fue el origen sindical del ministro Soto, el actual secretario general de esa organización, Daniel Aguirre, sostuvo que la convocatoria anticipada a paritarias representa «una señal auspiciosa», ya que «comenzamos a discutir salarios antes de que termine enero».
Admitió sin embargo que no hay definiciones y que la posición de Utre es mantener sus exigencias a partir de una mejora de un punto en el nomenclador salarial, a la vez que sostendrán la demanda de crear nuevos puestos de trabajo en un esquema donde sea incluido el docente de doble escolaridad, un cargo que hasta ahora no existe en el escalafón del sistema educativo chaqueño.
En todos los casos los pedidos sindicales son firmes y representan una barrera compleja para el acuerdo que persigue el Ministerio de Educación. En especial porque el gobernador suplente mira las conversaciones de lejos sin comprometerse con las propuestas que bajen de las organizaciones gremiales.
De la primera reunión que no tuvo avances, que duró más de dos horas, participaron por el Gobierno además de Soto, los subsecretarios Daniel Farías (Educación), Martín Mernies (Administración Financiera y Recursos Humanos) y Elizabeth Mendoza (Interculturalidad y Plurilingüismo). Mientras que por parte de los sindicatos estuvieron presentes Atech, Federación Sitech, Sitech Sudeste, Sitech Castelli, Utre-Ctera y la Coordinadora de Gremios Docentes (conformada por Amet, Fiud, UDA, Adoch y Achabi), como así también Sadop.
» Con los docentes en pie de guerra
El vicegobernador a cargo tendrá su primer gran desafío. ¿Se iniciarían o no las clases en el Chaco? Un interrogante por ahora sin respuestas. Bacileff ha mostrado poca cintura para situaciones de conflicto acaso como si quisiera aparecer apagando el fuego con nafta. Los augurios no son halagüeños, y así lo entienden los propios docentes.
Comentá la nota