A pocos días de asumir en el Ministerio de Desarrollo Social, María Angélica Torrontegui ultima detalles para delinear su equipo de trabajo definitivo, y mientras tanto larga en toda la provincia el funcionamiento de más de 400 merenderos. Aseguraron que cada uno podrá cubrir las necesidades de 30 chicos, quienes recibirán una cajita de leche chocolatada, un alfajor y una barrita de cereal. Aseguran que la idea es que los chicos salgan de la escuela y vuelvan a sus hogares con la merienda comida, “por si no pueden comer a la noche”.

“Comienzan mañana (por hoy) más de 400 merenderos en San Luis, Villa Mercedes, y el interior de la provincia. Nos reunimos todos los días con muchos dirigentes que quieren formar estos merenderos en distintos lugares”, afirmó Torrontegui, y agregó: “Cada dirigente, un merendero. En la unidad básica, en la casa, en el club, donde sea. El merendero tendrá no más de 30 chicos para que de esta manera, podamos movernos con una seguridad y un espacio adecuado. Siempre los niños tienen que estar con la mamá, el papá o el hermano mayor, porque no nos podemos hacer responsables si les pasa algo”.

Con este plan, el Gobierno busca atender la emergencia social de aquellos niños que no tienen la posibilidad de alimentarse correctamente en sus casas. “Vamos a darle el alimento efectivo para transportarlo rápidamente, y que sea nutritivo. Cada chico tendrá una cajita de leche chocolatada, con un alfajor y una barrita de cereal que complemente. En este momento ya está recorriendo la distribución por parte del ministerio”, aseguró la flamante ministra. 

En la calle

En líneas generales, una de las políticas más importantes que tomará el Ministerio de Desarrollo Social es el contacto directo con la gente, con sus problemas en el día a día. “Que nadie me pida ninguna audiencia, porque me van a encontrar en la calle, visitando toda la provincia”, aseguró la Ministra.

Luego amplió: “Tenemos que observar cara a cara en el lugar, qué está necesitando la gente, y actuar rápidamente. Esta área es muy sensible, y hay que tener permanentemente el corazón latente, la mirada atenta, y la acción rápida y efectiva”. Confirmó que buscarán desechar todas las trabas burocráticas. “Una persona que llega a nosotros, lo hace con una necesidad y un caudal de angustia, desorientación, y dolor muy importante. Lo primero que hay que hacer es una contención emocional. Un abrazo afectivo para escuchar qué es lo  que necesita. Hay que eliminar los trámites tediosos y lentos, y hacerlo efectivo desde la inmediatez”, aseveró.