Prevén pagar febrero la próxima semana, pero los empleados piden que no pase del sábado. El interventor apuntó al turismo como una fuente de ingreso genuina para superar la crisis.
Con la aclaración de que continuarán en asamblea permanente hasta cobrar la totalidad de los sueldos adeudados, los empleados de la Municipalidad de Coronel Moldes recibieron al interventor Rodolfo Antonelli y levantaron el paro.
Pasado el mediodía de ayer, el exsecretario de Turismo de la comuna salteña se hizo cargo de la administración de la vecina localidad, paralizada desde hace tres meses. Antonelli, tras la sanción de la intervención de las cámaras de Diputados y Senadores, fue designado de inmediato por el Ejecutivo provincial para superar la grave crisis institucional moldeña y, hasta diciembre de 2017, se espera que no solo transparente la cuestión presupuestaria, sino también la que involucra a cientos de empleados, muchos de ellos en situación irregular, y que impulse el desarrollo de la localidad.
Antonelli no quiso perder tiempo y con un pequeño gabinete integrado por un contador, un abogado y un especialista en recursos humanos, tras jurar ordenó una auditoría en cada una de las oficinas del municipio. Como era de esperar, apuntó primero a la Tesorería y siguió por Acción Social. Mientras anticipó que alquilará una vivienda para vivir en Moldes, lo primero que hizo fue dialogar con los representantes gremiales que acompañaron la extensa protesta de los empleados contra la administración del destituido intendente Osvaldo García.
El compromiso
"La próxima semana iniciaremos el pago de febrero. Es todo un desafío ser interventor del municipio porque la deuda es pesada, pero confío en sacarlo adelante. Tenemos el pedido y el apoyo del Gobierno de la Provincia, pero necesitamos de todos los vecinos. Vamos a reunirnos con los diferentes sectores representativos de esta comunidad", les dijo Antonelli a los empleados que, colchones y frazadas en mano, levantaron la protesta de 73 días y la toma del edificio municipal. Limpiaron la antigua casa comunal y junto al interventor comieron de la olla popular instalada en el acceso.
La aclaración gremial
"Se levantó el paro, pero seguimos en asamblea permanente. Los pasos a seguir los vamos a decidir entre todos. Hay buenas intenciones, pero necesitamos cobrar. Comenzaron las clases y no tenemos cómo mandar a los chicos a la escuela", explicó a El Tribuno el delegado de ATE, Miguel Gómez. Aunque el interventor ya dijo que comenzará a pagar la semana próxima, los municipales solicitan cobrar, como mínimo, el sueldo de febrero hasta este sábado, y pactar el resto de los meses.
El gran interrogante es saber con qué fondos. Antonelli no solo deberá abonar salarios, sino también las deudas a proveedores y aceitar la maquinaria para poner en marcha nuevamente los servicios y concluir o comenzar obras imprescindibles. Los anticipos de coparticipación ya se gastaron y los ingresos no llegan a cubrir mínimamente los gastos municipales.
"Vamos a apoyar la gestión de este interventor, más aún si comienza a pagar febrero este jueves (por hoy) o hasta el sábado. Queremos volver a la normalidad", insistió Gómez. Los representantes locales de ATE y UPCN consideraron que "ahora es el momento de saber cuántos ñoquis hay. El que no trabaja debe salir de esta Municipalidad y quedar los que siempre han trabajado. El excedente es por los ñoquis de García", sentenciaron.
Lo que viene
El interventor confirmó que estudiarán caso por caso la planta municipal. "La idea es no despedir a nadie, pero tampoco podemos tener una megaestructura con los pocos recursos que están a nuestro alcance. Debemos pagar sueldos y mantener los servicios de esta localidad bella y turística y, en ese contexto, mi objetivo es desarrollar a Moldes en su potencial turístico. Para eso vine. No voy a dedicarme solo a pagar sueldos, sino que hay que posicionar al municipio. El desafío es doble, pero soy hombre del área de turismo y creo que esa es una importante salida".
El Tribuno pudo saber que, además de los tres funcionarios de Antonelli, llegará en los próximos días una comisión enviada por el jefe de Gabinete, Carlos Parodi, que tendrá la misión de desempolvar la documentación de los desmanejos que se le atribuyen al exintendente, con la promesa de generar un plan de obras inmediatas, mejorar la atención al contribuyente y poner énfasis en la recaudación impositiva del área del dique Cabra Corral.
La situación del exintendente GarcíaOsvaldo Darío García (PJ) tiene dos pedidos de juicio y tres causas abiertas por falta de pago, libramiento de cheques sin fondos y desvío de dinero público.La firma JM Construcciones, adjudicataria de la obra de defensas con gaviones y encauzamiento del cauce del río Chuña Pampa, denunció a García el 7 de noviembre de 2013. La fiscal, Mónica Poma, de Delitos Económicos Complejos, comprobó que el municipio desvió los fondos dejando a la empresa sin los pagos correspondientes por las tareas que ya se había realizado.El segundo caso gira en torno del libramiento ilegal de cheques. José Ignacio Dávalos Saravia, apoderado de la Asociación Mutual Pymes Argentinas, lo acusó por librar cinco cheques en concepto de pago a la entidad, que fueron rechazados por no tener fondos.También fue denunciado por Jorge Ovalle, un comerciante de Moldes, por la compra de mercadería en representación de la Municipalidad y la Cooperadora Asistencial por $17.000, los cuales pagó con tres cheques que tampoco pudo cobrar.Otra causa surge de dos denuncias radicadas por la exconcejal Rita Susana Carreras, quien en su primera acusación, radicada el 23 de julio de 2015, reveló que el exintendente le abonó solamente 4 meses de su dieta, debiéndole el importe de otros 15 meses.Se suma una nueva, evidenciada en los informes de la Auditoria General de la Provincia, que evaluó el municipio y que motivó otra denuncia del actual Concejo Deliberante. Todo esto provocó que García sea citado a una audiencia de imputación y, entre hoy y mañana, deberá presentarse ante la Fiscalía de Delitos Económicos Complejos 2 a cargo de María Eugenia Guzmán.
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