El titular del Poder Ejecutivo asegura que estudia competir electoralmente para dirigir su pueblo natal. Anunció que en 2017 se votará en octubre y que ganará las elecciones. Además, le puso un freno a las aspiraciones de liderazgo de “Cambiemos”.
Ricardo Colombi insiste en que la prórroga de su mandato es “imposible”. Que hoy analiza ser intendente de Mercedes, su pueblo y que tiene 6 candidatos a gobernador. Que ya tiene a su sucesor y que se votará en octubre.
“Vamos a ganar también en 2017”, aseguró ayer el Gobernador en una entrevista exclusiva . “Habrá un nuevo gobernador en 2017 y yo analizo ser candidato a intendentes de Mercedes”, ratificó.
Según el propio mandatario aún no decidió si será candidato a intendente, pero es lo que hoy se le “ocurre”. Además afirmó que no le interesa un cargo nacional.
Minimizó un posible enfrentamiento electoral con el actual intendente de Mercedes, Víctor Cemborain. “Ese es chico pleito”, chicaneó.
Reiteró que la reforma de la Constitución Provincial es necesaria. “Pero no para la reelección. Eso no”.
“La prórroga de mandatos es imposible”, lanzó y buscó acabar con cualquier discusión al advertir que una extensión de mandatos es “imposible hasta con un plebiscito”.
El mercedeño insistió, como lo hizo horas después de lograr ser reelecto en 2013, que ya tiene a su sucesor y que “sigue siendo el mismo”. Aunque aconsejó “no pensar en eso”.
Sin embargo, también confirmó que en la actualidad trabajan con seis posibles candidatos y uno no es del partido. “Ya tengo sucesor y sigue siendo el mismo. Pero hoy hay seis candidatos a gobernador”, dijo.
Se negó a dar mayores detalles y ni siquiera quiso anticipar si sería candidato o candidata. Tampoco se ánimo a negar si el “sucesor” está en su gabinete o no.
“Yo digo que son seis los candidatos a gobernador. Pero el elegido puede no estar dentro de esos seis”, ahondó en el misterio.
Consultado acerca de porqué sigue instalada la cuestión de la prórroga de mandatos, ante su rotunda negativa, Colombi dijo: “Eso habría que preguntarle a la gente. Pueden pensar bien o mal. Eso es cuestión de ustedes. Lo que yo digo es que el año que viene habrá un nuevo gobernador”.
También lanzó el mes de las elecciones a gobernador en 2017. “Votaremos en octubre”, dijo pero se negó a anticipar fecha.
En el mismo sentido, le puso un límite a Cambiemos y aseguró que la impronta es Encuentro por Corrientes.
“Encuentro por Corrientes es el Norte. Acá hay un modelo que va a tener su impronta. La letra chica se discutirá después. Nosotros no somos Cambiemos. Acá no se quiénes son los de Cambiemos”, dijo.
Se consideró invicto en todas las elecciones. Pese a que perdió los comicios legislativos en 2007 en los que fue candidato a senador provincial.
“No perdí esa elección. Para mi fue un triunfo, porque perdí por 4.500 votos contra todo el aparato del Gobierno provincial. Para mi eso es un triunfo”, se jactó quién no conoce derrota electoral.
Bajó línea al advertir que “si un dirigente piensa que es dueño de los votos, no sólo está equivocado sino que no tiene los pies en la tierra”.
Consultado sobre su negativa a aspirar a un cargo nacional, fue contundente: “No me gusta. No lo siento. Es mucho más lindo estar en mi provincia que en Buenos Aires”.
Negó tener responsabilidad en el cierre y despido de seis empleados de la oficina de la Administración Nacional de Seguridad Social (Anses) de Mercedes. “No se nada de eso. No tuve nada que ver”.
Volvió a exhibir la chapa de ser el gobernador que más tiempo ocupó el cargo al afirmar que “acá no hay nada que esté dejado al azar. Acá esta todo planificado y previsto, por eso no somos improvisados”.
Se rehusa a pensar en el bronce, que ya le corresponde por ser el mandatario que superó a Pedro Ferré en el uso del poder.
Desde su mullido sillón afirma que es “un correntino más”, que no habrá prórroga de mandatos y que ya tiene a su sucesor. por Agustín Gómez, El Litoral
Comentá la nota