El sector textil es uno de los más beneficiados por las medidas de administración de comercio exterior llevadas adelante por el Gobierno nacional y tal vez por eso sea el que más respalda lo que se suele llamar “proteccionismo”. Aunque no faltan las quejas por los inconvenientes para el ingreso fundamentalmente de bienes de capital, los industriales textiles se encolumnan detrás de las herramientas y medidas que buscan preservar el mercado interno.

Así lo ratificaron ayer durante la octava convención anual de la agro industria textil y de indumentaria argentina, Pro Textil 2012, organizada por la fundación Pro Tejer. En este marco, economistas referentes de distintas entidades industriales se alinearon al Gobierno y descartaron que las mejoras de competitividad puedan venir solamente vinculadas con el tipo de cambio y precios.

En su exposición, el titular de la Unión Industrial Argentina (UIA), José Ignacio De Mendiguren, realizó un fuerte pedido a los empresarios para que tomen los créditos productivos disponibles a partir de la normativa oficial de obligar a los bancos a prestar el 5% de sus depósitos con este fin. Dijo que esto resulta “estratégico” para el sector, a fin de demostrar que la industria es “eficiente”. Su temor es que, ante la falta de interés empresario por esta financiación “se convalide” la postura de los bancos de prestar sólo al consumo, con mayor renta.

“Vayamos por los créditos que el Gobierno obligó a los bancos a dar. Nunca hubiéramos pensado que el Gobierno iba a fondear a la producción. Lo peor que nos podría pasar es que esos créditos no se tomen. Es un tema estratégico. Demostremos que son eficientes”, remarcó el titular de la UIA.

En diálogo con BAE, De Mendiguren ratificó que el de los créditos “es un tema trascendente”, porque “ha habido a través de la reforma a la Carta Orgánica del Banco Central una decisión política de que los bancos direccionen un 5% de su cartera a la producción; y el Gobierno no solamente lo ha puesto en marcha, sino que está ejerciendo un control para que se ofrezca”.

“No me gustaría que frente a un esfuerzo tan importante por parte del Gobierno sobre este aspecto crediticio, porque se dejen de tomar los cupos disponibles, se termine de convalidar que los bancos podrían tener razón en los planteos que hacían antes”, explicó.

Pro Textil reúne todos los años a empresarios de los distintos eslabones de la cadena de valor textil y fue en este contexto que referentes, funcionarios y economistas vinculados con el sector industrial destacaron los beneficios de las medidas de comercio administrado encaradas desde el Gobierno y tantas veces cuestionadas fundamentalmente desde el sector importador.

Al respecto se refirieron diferentes expositores de la convención. “Las medidas de protección comercial lograron que el sector textil en la Argentina mantuviera el crecimiento, mientras que en el resto de la región se evidenció una merma de la actividad”, sostuvo Mariano Kestelboim, director ejecutivo de la Fundación Pro Tejer. Y explicó que el sector textil entre el 2003 y lo que va del 2012 “lleva más de u$s2.000 millones invertidos en la ampliación de la capacidad productiva”.

En idéntica línea, la economista de la Fundación Pro Tejer Julieta Loustau abogó por “la necesidad de impulsar y defender el mercado regional, para lograr el sostenimiento de actividades, como el rubro textil, que son generadoras de empleo”, con casi medio millón de puestos de trabajo directos, pero además porque el grueso de sus agentes económicos son pymes: En total, unas 17.000, según datos aportados por Kestelboim.

Otro de los aspectos que hace que sea una actividad particularmente protegida es que casi la totalidad de la cadena productiva es de origen nacional; es decir, desde la fibra para la confección de la tela hasta el cierre del proceso industrial que lleva el producto final a la vidriera.

“Tenemos una cadena de valor que multiplica por 20 el precio de las materias primas”, destacó Kestelboim.

También De Mendiguren señaló a este diario que las importaciones “están funcionando mejor”. Temíamos al principio, atento a la necesidad de nuestros insumos importados, que afectara el nivel de actividad; pero es cierto que mes a mes se va mejoran en la administración”, remarcó.

El titular de Pro Tejer, Marco Meloni pidió, por su parte, “profundizar el modelo productivo inclusivo, con políticas de Estado, más allá de quién gobierne”.