Por: Agustín Maza.

El ministro de Economía, Sergio Massa, firmó esta tarde un acuerdo con el Club de París por el remanente de deuda que le quedaba al país desde 2019. El entendimiento por USD1.972 millones contempla una extensión de los plazos hasta 2028, una reducción de la tasa de interés promedio del 9% al 4,5% y una quita de USD248 millones que regían en concepto de punitorios. La negociación incluyó una estrategia para que el titular del Palacio de Hacienda no quedara de "rehén" en Francia si no prosperaban las charlas.

“Nos sacamos la última espina clavada en materia de deuda, era lo que reclamaban todos los países europeos en el directorio del FMI”, festejaban en el quinto piso del Palacio de Hacienda luego de rubricar el convenio. Además, afirmaron que propuesta argentina fue más "agresiva" que la llevada adelante en junio por el ex ministro Martín Guzmán, antes de su renuncia al cargo. 

El nuevo entendimiento es una addenda al que firmó en 2014 el entonces ministro de Economía, Axel Kicillof. En concreto, el nuevo convenio tiene un período de repago de trece cuotas semestrales, por un promedio de USD170 millones incluyendo capital e intereses, que comenzarán en diciembre de este año para cancelarse definitivamente en septiembre de 2028, mientras que originalmente era hasta 2026. 

Pero lo que más destacan cerca de Massa es la nueva tasa de interés que será en promedio ponderado del 4,5% anual, a diferencia de la del 9% que corría en el acuerdo firmado por Kicillof desde el 2019, luego de la suspensión de los pagos al Club de París en ese año. “Es un buen resultado teniendo en cuenta el contexto internacional actual caracterizado por el alza de tasas internacionales”, sostuvieron funcionarios del equipo económico en diálogo con BAE Negocios.

El acuerdo implica que en los próximos dos años Argentina devolverá un 40% del capital adeudado. “Si se replicaban las condiciones del acuerdo de 2014, en ese período se habría devuelto el 58% del capital”, explicaron las fuentes. En términos de alivio financiero, añadieron, el acuerdo implica una reducción de USD248 millones al valor presente sobre la deuda de USD1.972 millones, es decir, un 12% sobre el total.

Cuidar a Massa

Finalmente, Massa no viajó a París, por lo que los encargados de finiquitar el acuerdo fueron el asesor en asuntos financieros internacionales, Marco Lavagna y el jefe de Asesores, Leonardo Madcur, quienes desde este jueves mantuvieron encuentros con las autoridades del organismo de manera prescencial. En el equipo económico expresaron que podría haberse dado una presión adicional para el ministro en caso de que las negociaciones se frenaran por algún motivo, con el riesgo de quedar de "rehén" en el país europeo.

De hecho, la firma la hicieron Massa y el presidente del organismo, Emmanuel Moulin, a través de una conferencia virtual. El también funcionario del Gobierno francés estuvo acompañado por Lavagna y Madcur durante el zoom.

Las fuentes reconocieron que la “batalla más dura” para alcanzar un entendimiento fue la cláusula “pari passu”, que contempla un trato igualitario con otros acreedores para que, por caso, no se le pague más a China que a los países que integran el Club de París. Sin más precisiones, en Economía detallaron que pudieron separarse las operaciones financieras de las de infraestructura, ya que los préstamos con el país asiatico que tienen plazos más largos y montos superiores a los del acuerdo que se firmó esta tarde.

Club de París, un pendiente de larga data

Luego de los bonistas privados en 2020 y el FMI a principios de año, la renegociación con el Club de París era el pendiente que le quedaba al Gobierno en materia de deuda en moneda extranjera. Vale recordar que antes de su renuncia al Palacio de Hacienda en julio último, Martín Guzmán había acordado un puente de tiempo con el organismo para negociar pero su salida terminó demorando las conversaciones.

En Economía apuntaron que la propuesta argentina en esta negociación fue más “agresiva” que la realizada en junio pasado, “pero no para especular, sino para tener un mejor perfil y consolidar la confianza en los mercados, particularmente el europeo”. De hecho, comentaron que Guzmán no llegó a negociar sus términos y que mucho menos fueron aceptados por el organismo: “esa propuesta planteaba devolver el 58% del capital”.

La deuda con el Club de París había dejado de pagarse en 2002 y se mantuvo en esa situación hasta 2014, cuando se firmó un acuerdo para cancelarla en 5 años. En 2019, Mauricio Macri interrumpió los pagos al organismos, por lo que quedó un saldo impago de USD2.000 millones. Debido a los términos que acordó Kicillof, el saldo remanente devengaba un interés del 9%, por lo cual Argentina venía incrementando sus atrasos con ese costo financiero.