La chilena CCU, que produce Villa del Sur y Villavicencio, y la fábrica BIC, se sumaron a Bimbo y Fargo con subas récord, justificados en la liberalización que plantea el electo. Algunas dejaron de entregar mercadería. Las firmas aseguran que, a pocos días de asumir, no hay nadie de Milei mirando la economía real.
Por Leandro Renou.
Mientras Mauricio Macri y el presidente electo, Javier Milei, se debaten en internas por el armado del Gabinete, se está configurando un escenario peligroso en materia de precios, una dinámica de alzas furiosas ya montadas en una inflación del 140 por ciento que queda de la gestión del ministro Sergio Massa. La novedad es que, a las listas con subas del 50 por ciento enviadas por los proveedores a los grandes supermercados, se suman ahora nuevas listas, pero con incrementos por encima del 100 por ciento. Todas generadas en menos de una semana, luego del balotaje que dio ganador a Milei.
En paralelo, hay empresas que avisaron a los comercios que no entregarán mercadería si no les convalidan las subas sugeridas, lo que empieza a mostrar faltantes serios en góndola.
Según listados de incrementos a los que accedió Página I12, la firma BIC, en el rubro afeitadoras, subió un 100 por ciento, mismo porcentaje que la cervecera chilena CCU. En este caso, la compañía de bebidas trasandina aplicó un alza del 100 por ciento para la línea de aguas, que se fabrican bajo la marca Villa del Sur y Villavicencio. En la semana, la empresa mexicana que es dueña de las panificadoras Bimbo y Fargo, pasó listados con subas del 140 por ciento, siendo el dueño del 80 por ciento de la góndola. Un comerciante se asombró cuando vio que el valor al que se está yendo un paquete de pan lactal: hoy se consigue por encima de los 1000 pesos en supermercados y casi en 1600 en chinos. Con el aumento, aseguran, estará cerca de los 3500 pesos.
El caso de Fargo y Bimbo es de impacto porque, de hecho, tuvieron dos reuniones con el secretario de Comercio actual, Matías Tombolini, quien intenta ponerle coto a la embestida, y le aclararon que no negociarán con el Gobierno saliente. Además, en varios comercios han cesado la entrega de productos y esperan la liberalización de precios del nuevo presidente.
En este contexto, Milei no ha puesto en la transición a ningún funcionario encargado de la economía real. Las empresas afirman que a ocho días de ser ungido con la banda presidencial, "nadie de LLA se comunicó con nosotros". Lo cierto es que el electo tiene una idea centrada en lo financiero aplicable a todos los frentes, incluso la corrección inflacionaria. Ese supone ninguna intermediación del Estado en las relaciones comerciales, ergo, el reacomodamiento de precios al alza se hará de forma automática y descontrolada. Los privados estiman que todo lo que Milei deja pasar sin ordenar hoy en materia de precios, son al menos 5 meses de inflación mucho más alta que la actual.
Los aumentadores no perdonan
Las excusa que ponen las empresas para dar estos aumentos es la liberalización de los precios que garantiza Milei y, en paralelo, lo que entienden es una diferencia de valores entre el precio que venden en los hipermercados y el que exponen en los almacenes barriales, donde no rige Precios Justos. De todos modos, fuentes comerciales dijeron a este diario que las empresas que mandaron listas con aumentos de entre el 50 y el 140 por ciento, ya habían subido, también, en los comercios barriales.
Así y todo, volvieron a aumentar fuerte. Los nombres de las compañías que subieron sus precios hasta un 60 por ciento son los siguientes: Clorox, la principal firma del producto a nivel nacional, aumentó 62 por ciento; Mastellone, la firma que produce la leche La Serenísima, avisó que subirá sus precios un 50 por ciento, lo mismo que la fabricante de higiene personal Colgate.
Asimismo, la multinacional Unilever, que produce limpieza y alimentos, pasó aumentos del 40 por ciento, mientras que Arcor envió mensajes con hasta un 35 por ciento de incremento. Procter and Gamble subió un 30 por ciento, mismo márgen que la estadounidense Mondelez. Mientras que Coca Cola pasó un listado con subas de hasta el 35 por ciento. En la misma línea, Sc Johnson subió 25 por ciento; y Nestlé un 35 por ciento.
Hasta el momento, Milei viene planteando que no sostendrá ninguno de los planes de precios, y empezó a flotar en el aire la sensación de que muy probablemente no se utilice la Secretaría de Comercio, que es la cartera que regula la relación con los formadores. Viendo el asunto en retrospectiva, Macri hizo exactamente lo mismo al inicio de su gobierno, y luego volvió atrás cuando se dio cuenta que la inflación se le iba de las manos. El ex presidente terminó reponiendo todos los acuerdos de precios que se habían trabajado en el gobierno de Cristina Fernández.
Comentá la nota