En promedio, los aumentos rondan el 50%, una cifra cercana a la inflación. Pese a eso, se incrementaron las compras respecto al año pasado. Los clientes aprovechan promociones y descuentos. Hay faltante de algunos productos.
Pese a un incremento en los precios que promedian el 50%, las ventas en las librerías crecieron en forma significativa en la previa del inicio de un nuevo año escolar. ¿El motivo? La certeza de que los alumnos volverán a las aulas después de dos años marcados por la pandemia del coronavirus,
Según confiaron los comerciantes en una recorrida realizada por LA CAPITAL, la suba de las ventas es fuerte en comparación con el año pasado aunque aún esperan el comienzo del ciclo lectivo para confirmar las cifras oficiales.
El principal motivo obedece a que a esta altura del año pasado reinaba la incertidumbre en torno a la presencialidad. Además, la mayoría de los alumnos todavía contaba con los materiales adquiridos en 2020, que no fueron utilizados ya que las clases se dictaron en forma virtual. De esta manera, desde hace dos semanas el movimiento es intenso en las librerías y se espera que crezca aún más en los próximos días.
“La realidad es que estamos vendiendo bien. Tiene mucho que ver que en 2021 se vendió muy poco, porque la gente que había comprado antes de la pandemia, tenía todo nuevo”, confirmó Juan Rey, propietario de Librerías Keops.
Los aumentos en los precios, en promedio, rondan el 50%, cifra cercana a la inflación del 2021. No obstante, en las librerías remarcaron que la variedad en los precios es amplia por lo que cuesta definir el valor aproximado de una canasta escolar.
Los precios cambian según la calidad o los personajes de fantasía en el caso de cartucheras o mochilas. Estas últimas se pueden conseguir desde 2 mil pesos pero también hay de 12 mil. Algo similar ocurre con el resto de los útiles por lo que cada familia arma su canasta de acuerdo a su situación económica.
“Si bien la situación económica no es fácil, las ventas vienen bien y creo que van a ser mejor”, completó Rey.
En Cuenta Conmigo, librería ubicada en Jara y French, señalaron que en las últimas semanas “aumentó mucho el movimiento”. “Viene mucha gente del barrio que ya conoce la calidad de los productos. Algunos llevan la lista completa y otros van comprando por etapas”, contó Laura.
Además, agregó que la mayoría de las familias prefieren invertir en mochilas y cartucheras de buena calidad, por más que resulten más costosas, y que “achican el gasto en el resto de los útiles”.
Por otra parte, resaltó el impulso de las promociones con tarjetas de crédito de diferentes bancos, con cuenta DNI o los descuentos por pago contado.
En Librería Luro, ubicada en el centro de Mar del Plata, destacaron que a diferencia del año pasado, en esta oportunidad las ventas empezaron antes.
“El año pasado por la inseguridad sobre el inicio de clases ni los colegios entregaron listas anticipadas ni los papás quisieron comprar mucho en forma anticipada. Este año en cambio ya muchos turistas aprovecharon días malos de playa, horarios pre y post playa o compras de último momento para armar la canasta escolar”, explicó Alfredo Kostzer.
Asimismo, el comerciante señaló que el cliente “consulta y arma su compra en función de las opciones de pago que le dan las tarjetas de crédito con promos de descuentos”.
En referencia a los precios, Kostzer aseguró que el sector “acompañó la inflación interanual que rondó el 50%”.
“Muchos medios nacionales hablan del 80%, pero no son reales ya que se incluye productos que las librerías no comercializamos”, analizó.
Impulso
En las librerías de la ciudad coincidieron en el impulso que significó el programa “Más Cultura”, que posibilita que 400.000 jóvenes de todo el país puedan acceder a bienes, servicios y prácticas culturales.
Los inscriptos acceden a una tarjeta virtual con 5.000 pesos de crédito semestrales que podrán usar para ir al cine, teatro, eventos musicales, museos y espacios culturales.
Pero también se puede utilizar para comprar libros o útiles escolares en los locales adheridos.
“Generó una avalancha de pedidos de todo el país ya que no todas las librerías la aceptan, por lo que lo restringimos a clientes de Mar del Plata y de manera presencial”, apuntó el responsable de Librería Luro y destacó que el programa tiene “un funcionamiento similar al PreViaje”.
Faltante
La creciente demanda de útiles escolares dejó en evidencia las complicaciones que tienen muchos comerciantes para reponer el stock. “Falta mercadería. Salvo el papel, todo tiene componentes importados, y no están entrando esos productos”, aseguró Juan Rey y agregó que el faltante “se nota mucho”. “Por ejemplo, la mayoría de las mochilas, carpetas o canoplas, son de años anteriores y hay pocas con los personajes de fantasía nuevos”, reveló.
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