La empresa propone indemnizarlos a todos por el tiempo de servicio prestado, pero nada dice acerca de la continuidad de la fuente laboral. Cabe remarcar que son 13 los trabajadores, de los cuales, solamente 2 estaban en negro y el resto en blanco.
La Asociación de Trabajadores de la Salud, (Atsa), acompañó desde un principio a las personas que fueron cesanteadas, y a quienes no se les dio ningún tipo de respuestas con respecto a la continuidad de la empresa, con quienes decidieron tomar el edificio en forma de reclamo.
El martes, se dieron de alta a todos los pacientes que se encontraban en el Lamparelli, y las atenciones previstas fueron suspendidas de forma sorpresiva, luego de que se haya despedido a los empleados, pero nada se sabía acerca del destino de estos trabajadores.
La empresa propone indemnizarlos a todos por el tiempo de servicio prestado, pero nada dice acerca de la continuidad de la fuente laboral. Cabe remarcar que son 13 los trabajadores, de los cuales, solamente 2 estaban en negro y el resto en blanco.
El prosecretario gremial de Atsa, Adrián Bellomi, dijo que los directivos pusieron como argumento el cierre del sanatorio, la falta de trabajo, aunque cuestionó que la empresa “jamás en los últimos años se preocupó por competir en el medio, directamente se dejó llevar y nunca se preocuparon en mejorar la calidad de servicio”.
En este sentido, apuntó a “la doctora Lamparelli y al doctor Carranza”, directivos que “jamás se preocuparon porque este establecimiento genere trabajo, simplemente se dejaron llevar hasta conseguir que se funda”.
El cierre del Lamparelli, hace presumir en los trabajadores una posible venta del sanatorio, por parte de los directivos, pero tampoco observan un interés para que los empleados continúen en sus puestos de trabajo.
“Hasta el momento la empresa propone indemnizar con el 50 por ciento del total del servicio, pero dejan de lado el reconocimiento de las deudas salariales de años anteriores”, expresó Bellomi.
Medida de fuerza
Los trabajadores habían llegado a la decisión de tomar el edificio ya el martes por la tarde noche, luego de haber mantenido una asamblea en el sanatorio, tras los despidos y una falta de respuesta de la patronal a estos reclamos.
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