La cámara de Diputados de la provincia dio media sanción en su sesión de ayer al proyecto de ley a través del cual Catamarca adhiere a los términos de la ley que da marco legal al uso del cannabis con fines medicinales.

Con la presidencia del diputado Marcelo Rivera, los legisladores discutieron y aprobaron ayer la adhesión a la ley nacional N° 27.350, "que establece un marco regulatorio para la investigación médica y científica del uso medicinal, terapéutico y/o paliativo del dolor de la planta de cannabis y sus derivados, garantizando y promoviendo el cuidado integral de la salud”.

La iniciativa parlamentaria fue presentada por el diputado Oscar Pfeiffer, quien indicó que el programa que conlleva adherir a la normativa nacional permitirá encarar acciones de promoción y prevención orientadas a garantizar el derecho a la salud, promover medidas de concientización dirigidas a la población en general, establecer lineamientos y guías adecuadas de asistencia, tratamiento y accesibilidad, garantizar el acceso gratuito al aceite de cáñamo y demás derivados del cannabis a toda persona que se incorpore al programa.

Asimismo, la ley impulsa el desarrollo de evidencia científica sobre diferentes alternativas terapéuticas a problemas de salud, que no abordan los tratamientos médicos convencionales, investigar los fines terapéuticos y científicos de la planta de cannabis y sus derivados en la terapéutica humana, comprobar la eficacia de la intervención estudiada, o recoger datos sobre sus propiedades, así como su impacto en el organismo humano.

En la fundamentación del proyecto, el legislador sostuvo que "por su elevado costo, a pesar de ser relativamente fácil de producir, muchas familias no tienen otra salida que la autoproducción, lo cual está prohibida y las expone a ser alcanzadas y sancionadas por la ley”.

"Los familiares de los pacientes no esperan el permiso para utilizar el aceite, de modo que apoyamos la creación de una regulación que muestre un Estado sensible y presente”, indicó.

En Catamarca, pacientes cannábicos y sus padres, que forman parte del "Movimiento Cannábico Manuel Belgrano”, vienen luchando desde hace tiempo para obtener de forma regulada y segura la medicina que tanto necesitan.