Es conocido que varias agrupaciones espirituales trabajan en el Servicio Penitenciario con los internos. Sin embargo, los dichos de Gustavo Cortéz sobre su "arrepentimiento divino" por haber matado cuando conducía en estado de ebriedad a María Celeste Archerito, pusieron al descubierto el accionar de sectas en la institución penitenciaria.

Desde la Pastoral de la Iglesia Católica que trabaja en el Penal dijeron que hay algunas personas que llevan mensajes erróneos a los internos. "A Cortéz parece que le lavaron el cerebro. Dio un mensaje totalmente erróneo del arrepentimiento y del amor de Dios. El Señor nos ama y su amor es tan inmenso que está esperando nuestro arrepentimiento" dijo Gloria Mercado.

Asimismo añadió que Dios está con todas las personas. "Todos somos pecadores, pero debemos arrepentirnos de nuestros pecados, porque esa es la forma en la que Dios nos perdonará".

Luego de que Cortéz expresara que él sólo se hacía responsable ante Dios y que "si Dios quiso que yo esté acá atravesando esto, bueno, pero ante la Justicia de acá soy un ratoncito de laboratorio" su abogado defensor argumentó que estaba sorprendido por los dichos del joven y añadio que “Yo he notado que Gustavo no está bien, pero es normal por el mismo encierro de la cárcel. Estoy sorprendido al igual que su familia por lo que dijo, pero estoy seguro que no se quiso expresar de esa forma, de hecho él se arrepintió frente al juez antes que se leyera la sentencia”, explicó Leonardo Villaba.

La definición de secta es bastante amplia, pero lo más cercano al aspecto religioso, se refiere a un grupo o forma social que se separa de un grupo de origen preexistente, en seguimiento de un jefe carismático o de sus enseñanzas. Siguiendo la raíz del término podemos decir que aplica tanto a un grupo religioso como a un grupo político.

Si bien la palabra conlleva una carga social bastante negativa, se puede hacer referencia de una secta a todo grupo que se ha desprendido de una estructura mayor y ha tomado un camino distinto construyendo sus propios líderes espirituales.

Obviamente, esto permite que la "fe" que profesan estos movimiento sectarios, no sean los que mayor aceptación tengan en la sociedad, debido a que en su mayoría, son grupos reducidos.