El ex ministro de Gobierno bonaerense, Jaime Lamont Smart, fue condenado ayer a prisión perpetua por privación ilegal de la libertad y homicidio calificado en 42 casos vinculado al denominado “Circuito Camps”, y resulta así el primer civil en recibir una pena por delitos de lesa humanidad cometidos en la última dictadura militar.

La sentencia del Tribunal Oral Federal 1 de La Plata, presidido por Carlos Rozanski, involucró a otras 22 represores, entre ellos el ex subcomisario Miguel Etchecolatz, también condenado a perpetua , al igual que otros 14 ex miembros de las fuerzas de seguridsd. El médico policial Jorge Bergés fue condenado a 25 años de prisión.

La lectura de las sentencias transcurrió ante una audiencia completa en la ex sede de la AMIA platense y una representación masiva de organizaciones políticas, que en las esquinas del edificio, siguieron las alternativas del juicio por una pantalla gigante .

El momento de mayor tensión fue provocado por Etchecolatz –estrecho colaborador del temible jefe de la Bonaerense, Ramón Camps, ya fallecido–, cuando levantó un cartel con cuestionamientos a la Justicia. Tenía la inscripción: “162 policías muertos. Justicia, ¿dónde estás? Ya llegará el juicio y el castigo. Justicia corrupta”.

Había concluido la enumeración de los delitos que lo involucraban y el exabrupto determinó su desalojo de la sala bajo un griterío de “asesino” que respondió con desdén.

Entre los presentes estaba el canciller Héctor Timerman. Su padre, que dirigía el diario La Opinión , fue una de las víctimas mencionadas por el Tribunal. En el largo listado estaban los estudiantes secuestrados en “La Noche de los Lápices” , y los integrantes de la agrupación Montoneros que en 1976 mantenían una imprenta en la calle 30 de La Plata, que resultaron muertos en un operativo conjunto de la Policía y el Ejército. En ese episodio secuestraron a la beba Clara Anahí Marini. Su abuela, Isabel “Chicha” Mariani (89), quien todavía la busca, permaneció en las primeras filas de la sala.

En la etapa de los alegatos, Smart (que fue parte del gabinete del general Ibérico Saint Jean) había declarado que como ministro de facto no tenía responsabilidad en los hechos y que la Policía bonaerense no dependía de él. Dijo que “las Fuerzas Armadas tenían a su cargo la lucha contra la subversión” en forma excluyente. No obstante, el fiscal Hernán Schapiro consideró que “tuvo un rol importante en el sistema de represión implantado” y explicó que “los centros clandestinos de detención (del Circuito Camps) funcionaban en comisarías a su cargo ”.

Para la fiscalía, en observación repaldada por el Tribunal, Smart “fue el sostén de la Policía a través del mantenimiento del personal y de la estructura edilicia” donde se mantenía secuestradas y se torturaba a personas. Lo condenaron por homicido calificado en concurso con dos o más personas, privación ilegítima de la libertad cometida por un funcionario público en abuso de sus funciones, agravado por el uso de violencia o amenazas de 41 personas que estuvieron detenidas en Puesto Vasco ; y otras 14 privaciones de la libertad que duraron más de un mes.