El gerente asistencial del nosocomio capitalino, Walter Villalba, detalló que los pacientes con cobertura que acuden al hospital escuela son en su mayoría afiliados al Instituto de Previsión Social (IPS) de Misiones, al Seguro Provincial de Salud o al Pami, que conforman un 28 por ciento del total, mientras que el 12 por ciento restante corresponde a otras entidades.

Villalba refirió que, al haber cada vez más trabas de parte de los sanatorios para la atención al IPS y a la obra social de los jubilados, los pacientes asisten a consultas y se someten a prestaciones y tratamientos cada vez con más frecuencia en el Madariaga.

En el sector privado, además, es insuficiente el servicio de guardia, principalmente pediátrica, por lo que el Parque de la Salud es la referencia más fuerte en la capital provincial.

Recientemente, el Madariaga recibió derivaciones de algunos centros médicos céntricos en los que se descompuso el tomógrafo.

Los sanatorios aducen falta de capacidad y problemas para cobrar a las obras sociales como justificativos para retacear la atención.

En el hospital existe un sistema solidario que se encarga del recupero de las prestaciones a los pacientes con cobertura, para distribuir los fondos en atender a aquellos sin obra social. Más allá de algunas demoras, desde el nosocomio aseguran que las entidades cumplen con los pagos.

En el interior también escasean las clínicas, por lo que el sistema público debe absorber la creciente demanda.

La falta de presupuesto en recursos humanos en el sector privado es una de las razones que justifica la alta demanda de pacientes con cobertura social en el hospital. Así lo planteó el ginecólogo Luis Flores, presidente del Colegio Médico de Misiones, que en la actualidad cuenta con 2.700 matriculados en toda la provincia.