La reunión está convocada para esta tarde y en el Ministerio de Agricultura confiaban en solucionar el conflicto creado por los cupos a las exportaciones de carne. Los gobernadores de Entre Ríos, Santa Fe y La Pampa pidieron un acuerdo para revertir el resultado electoral.
"Vamos a darle solución al conflicto de la carne", confiaban cerca del ministro de Agricultura y Ganadería, Julián Domínguez, respecto a la reunión que mantendrá este martes con la Mesa de Enlace, donde se hablaba de una flexibilización al cupo para exportar. Algunos gobernadores del Frente de Todos habían pedido a la Casa Rosada que encontraran rápido una salida que consideraban clave para remontar las elecciones en sus provincias. Por eso, el entrerriano Gustavo Bordet, el santafesino Omar Perotti, el pampeano Sergio Ziliotto y el bonaerense Axel Kicillof participarán del encuentro y tendrán una foto que les servirá para el objetivo de recuperar el esquivo voto de las zonas agropecuarias. El desafío pasará porque la decisión no genere un nuevo aumento en los precios domésticos, con lo que el remedio podría resultar peor que la enfermedad.
Hubo en la previa contactos telefónicos y reuniones entre los equipos técnicos, por eso en Gobierno daban por hecho el acuerdo. Domínguez estuvo el sábado en la Casa Rosada con el jefe de Gabinete, Juan Manzur, y en Olivos con el presidente Alberto Fernández para terminar de definir las condiciones. En Agricultura no querían dar nada por confirmado porque temían que cualquier trascendido alterara los ánimos. Las versiones indicaban que se levantarían las limitaciones de exportaciones con destino a China, restringidas desde finales de mayo junto con la carne Kosher, novillo no Hilton y un listado de siete cortes parrilleros. De esos, sólo se autorizó la venta Kosher con destino a Israel.
En pocos días en el cargo, Domínguez consiguió una centralidad que había perdido totalmente su antecesor Luis Basterra, quien ayer asumió como ministro de Educación y Cultura en Formosa. Así como en su momento tuvo la responsabilidad de reencauzar la relación con el campo luego del conflicto por la Resolución 125, esta vez Domínguez buscó una rápida salida al tironeo generado respecto a las exportaciones de carne vacuna. Aceleró contactos con los frigoríficos y con los técnicos de las patronales agropecuarias.
Presión interior
Para convencer al Gobierno del acuerdo, Domínguez contó con la colaboración de los gobernadores del oficialismo que exigieron encontrarle una solución al tema como indispensable para mejorar sus posibilidades electorales. Para más, en dos de esas provincias -Santa Fe y La Pampa- en noviembre se eligirán senadores, así que la posibilidad de revertir las derrotas sufridas en las PASO tienen una motivación extra.
La campaña del oficialismo tomó una dirección bien diferente respecto a lo que se hizo previo a las primarias. Así como antes se planteó el comicio como un plebiscito de la gestión nacional, ahora se apuntará a provincializar -e, incluso, municipalizar- todo lo que se pueda. Mientras más local, mejor. Todos los gobernadores que pasaron en los últimos días por Gobierno coincidieron en la conveniencia de hacerlo de esa manera y se comprometieron a ponerse al frente de sus campañas con el objetivo de revertir la elección.
En Gobierno coincidían que todos esos mandatarios tienen una imagen superior -en algunos casos muy superior- a lo obtenido por los candidatos del Frente de Todos en las primarias. Así que la lógica es que si logran asociar a los candidatos del oficialismo con su gestión, por lógica, conseguirían ganar. Algo así expresaron Bordet, Perotti y Ziliotto. No queda claro a cuántos de sus comprovincianos beneficia que se flexibilice el cupo a las exportaciones de carne, pero sí piensan que incide en el humor -y, en consecuencia, en el voto- de todas las poblaciones rurales. "Tenemos que aumentar los niveles de productividad. Por lo cual estamos pidiendo que se resuelva el tema de las exportaciones de carne en Argentina porque impacta en nuestras provincias", indicó Bordet, en un comunicado emitido el viernes.
Pero el cupo a la venta de carne al exterior tuvo origen en la acelerada suba de precios que tuvieron los precios domésticos en los primeros meses del año. De hecho, de esa manera consiguieron detener los incrementos. Se supone que los siete cortes parrilleros restrinngidos -asado de costilla, vacío, matambre, paleta, cuadrada, tapa de asado y falda- seguirán vetados, con el compromiso de las entidades y frigoríficos de mantenerlos bajo control.
De la reunión pautada para las 18.30 participarán Manzur, Domínguez, los cuatro gobernadores y los presidentes de la Federación Agraria (SRA), la Confederaciones Rurales Argentinas (CRA); Federación Agraria Argentina (FAA) y Coninagro. En el Gobierno aclaraban que sólo se trataría la cuestión de la carne y no entrarían en la discusión otros temas como impuestos y retenciones, como ya se animaban a dejar trascender desde las entidades.
Será un primer paso en la idea de Domínguez de acercar a los sectores agropecuarios al Gobierno. También tiene en carpeta para los próximos días convocar a la más amigable conducción del Consejo Agroindustrial Argentino para darle un nuevo impulso al proyecto de ley agroindustrial, que contempla el estímulo a las inversiones y a promover las exportaciones del sector.
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