El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, y su rival en las pasadas elecciones, Henrique Capriles, volvieron a cruzarse, esta vez por el rol que el ex candidato opositor le adjudicó a Cuba en la decisión del Consejo Nacional Electoral (CNE) de no habilitar la auditoría de todos los votos, sino sólo de una parte, tarea que comenzó este lunes.
"La oligarquía ataca con odio a presidentes hermanos", replicó Maduro a unas primeras declaraciones en las que Capriles denunció que al mandatario "le dijeron en Cuba que no permita la auditoría" de los comicios del 14.
"Lo que está claro es que al Enchufado Mayor (Nicolás Maduro) le dijeron que jamás permita la auditoría; que los cuadernos de votación son su sentencia", expresó Capriles en la red Twitter, en la que cuestionó el viaje del mandatario a la isla, el primero al exterior desde su asunción.
Como Capriles extendió las críticas al ecuatoriano Rafael Correa, Maduro replicó, también en Twitter, que "la misma oligarquía heredera de quienes dividieron Nuestra América atacan con odio a Presidentes herman@s del continente" y aseguró que "la respuesta debe ser más unión y lucha por la felicidad de nuestros pueblos".
"Pa`lante hermano Presidente Correa, pronto nos veremos para seguir uniendo a nuestros hermosos pueblos Suramericanos de Ecuador y Venezuela", dijo Maduro en otro mensaje, también replicado por la agencia AVN. Capriles le había pedido al ecuatoriano que "no se meta" en los asuntos venezolanos.
Correa había acusado de "golpista" al Capriles y a "toda la derecha venezolana", y éste consideró "inaceptables, además de irresponsables" sus palabras, y reclamó "respeto a los asuntos internos del país, no solamente el presidente de Ecuador, sino a cualquiera que pretenda venir a inmiscuirse".
El cruce fue el primer espasmo después de la decisión del CNE de rechazar el pedido de la Mesa de Unidad Democrática (MUD) de no habilitar una auditoría total sino apenas parcial, tarea que se inició hoy.
A partir de esa resolución del CNE, Capriles adelantó que después del 1 de mayo y en día "hábil" presentará la impugnación total de los comicios, paso para lo que tiene tiempo hasta el 6 de mayo.
"Hay fecha hasta el 6 de mayo. En cualquiera de estos días posteriores al Día del Trabajador y en día hábil (se presentará la impugnación) Pudiera ser jueves, viernes o el propio lunes", aseveró Capriles.
Un rato antes, Maduro había hablado a través de la televisión estatal para defender el rol del CNE y exigir "respeto" a su titular, Tibisay Lucena.
"Yo pido y exijo respeto para las mujeres venezolanas y en especial para Tibisay Lucena; que se respete como mujer y como profesional y que se respeten los poderes públicos", pidió el mandatario, durante la inspección de una fábrica de Petrocasas en el estado Zulia, con el que inició su "gobierno de calle".
El jefe del Estado, citado por AVN y DPA, ratificó además que elevarán en todas las organizaciones de derechos humanos del mundo "las acciones fascistas de la ultraderecha venezolana" tras los comicios.
Por otra parte, Maduro invitó a la clase obrera venezolana a una gran marcha, el miércoles, Día Internacional de los Trabajadores, "a la clase obrera en la calle y a los que quieran ir para Caracas, vamos hacer la marcha de las marchas".
"Esa va hacer una de las marchas más grandes que hemos visto el 1 de mayo", pronosticó, y explicó que dispuso el cambio de la ruta inicialmente prevista para la marcha, porque también la oposición prepara actos para esa jornada.
"Yo voy a marchar como un obrero más; eso sí, este obrero más, es el presidente de la patria, electo por ustedes y va a ser presidente por muchos años", advirtió Maduro.
Capriles, que avisó que no encabezará la concentración opositora, ironizó al respecto, al afirmar que Venezuela "no tiene el primer presidente obrero, sino el primer reposero (que toma descansos frecuentes) que llegó a la presidencia". "Es un vago que le dice a los trabajadores que los defiende y es mentira", concluyó.
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