Dos partidos tradicionales que intentan mantenerse a flote, aunque sin mucho respaldo de la estructura y varios referentes de la política local que, a través de fuerzas alternativas, han "bajado" a la pelea por una banca de concejal. Estos son los protagonistas de la elección que hoy tiene como escenario exclusivo a la Ciudad de Mendoza.

Los casi 100 mil ciudadanos que deben votar tienen diez opciones y ninguno de los opositores duda de que triunfará nuevamente la lista de la Unión Cívica Radical, encabezada por Rodolfo Suárez e impulsada por el intendente Víctor Fayad.

Por esto, la pelea parece haberse concentrado en el segundo puesto. Allí pretenden ubicarse, apoyados en los datos de encuestas propias, el Partido Demócrata con Guillermo Mosso como cabeza de lista; el Partido Justicialista liderado por Sebastián Godoy Lemos; el Pro de Orly Terranova y el Partido Socialista, que lleva a Alberto Montbrun.

Completan la oferta electoral: La Coalición que lidera el ex juez federal Luis Leiva; el kirchnerista Encuentro por la Ciudad, que lleva en primer lugar a María Angélica Escayola y tres partidos de izquierda: el Partido Obrero (Soledad Sosa), Movimiento Socialista de los Trabajadores (Gerardo Uceda) y Partido de los Trabajadores Socialistas (Nicolás del Caño).

Pero más allá de lo que a priori parece una victoria segura, Fayad se ha planteado otras metas que cumplir en esta elección: quiere quedarse con cuatro de las seis bancas que se renuevan para poder tener más peso en un Concejo que hoy le resulta esquivo. Para ello, no sólo necesita ganar sino ganar por mucho.

El intendente admite que su deseo es superar el 40% que obtuvo cuando fue electo en 2007. Pero también hay otro fantasma que vencer y es el 50% que acaparó el cobista Frente Cívico Federal en las legislativas de junio pasado.

Es que justamente una de las razones del desdoblamiento electoral fue el rechazo de Fayad a integrar esa alianza de la UCRcon el vicepresidente, Julio Cobos, quien aunque hace unos días manifestó que apoya a los candidatos del radicalismo en esta contienda, se ha mostrado alejado de la campaña.

Para Fayad, una victoria resonante significa también una plataforma imprescindible desde la cual construir su candidatura a gobernador, que él niega en público pero con la que se ilusiona en privado en busca de una revancha luego de las dos derrotas que sufrió en los ´90.

La oposición y sus dilemas

El Partido Justicialista lleva como principal candidato a un ex funcionario del Gobierno provincial que pudo mostrarse junto al gobernador, Celso Jaque, tantas veces como el intendente Fayad y su principal candidato. Luego de salir tercero en 2007 y en la legislativa de 2009, el PJ capitalino no ha puesto demasiadas expectativas en el resultado, pero una derrota dura golpeará más al oficialismo provincial.

El Partido Demócrata llega luego de romper su alianza con Pro por la negativa a dar el primer lugar en la lista al candidato que proponía el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri. Ha difundido encuestas que lo ponen segundo (puesto que ocupó en las legislativas de 2009), pero lo cierto es también que muchos creen que deberá compartir su electorado con su ex aliado y un mal resultado dejará heridos internos y huellas para 2011.

Precisamente, Pro se transformó en la vedette de la elección cuando anunció que llevaría como primer candidato a Orlando Terranova, el joven que se hizo famoso por su participación en el rally Dakar.

Casi emulando a su padrino político, el ex presidente de Boca, Mauricio Macri, Terranova pasó de ser hijo de un empresario de peso a ser reconocido por su incursión en el deporte. Con la popularidad conseguida, saltó a la arena política. Su próximo objetivo, de salir bien parado hoy, sería candidatearse a intendente en 2011.

El desempeño de Terranova también es importante para Macri, que apuesta a conseguir en Mendoza su primer resultado importante fuera de la Ciudad de Buenos Aires, ya que hasta ahora su partido no ha logrado hacer pie más acá de la General Paz. Por esto, el porteño vino dos veces a Mendoza y caminó las calles con su discípulo para hacer campaña.

El otro partido que se muestra como potencial segundo es el Socialismo, que candidatea en primer lugar a Alberto Montbrun, un ex radical que fue funcionario en la Municipalidad de Capital y legislador provincial. De ingresar, se trataría de un hecho inédito, pues nunca un socialista ocupó una banca en Capital.

Leiva, en tanto, llega con la experiencia que le han dado sus dos candidaturas a diputado nacional y la de gobernador. Mientras, Escayola, que fue diputada provincial por la Alianza, busca un lugar para defender el proyecto kirchnerista en Capital y durante la campaña se rodeó de figuras nacionales alineadas con el gobierno de Cristina Fernández.