El canal del Ministerio de Educación de la Nación repone el documental “Éxodo”, visión fragmentada e incompleta de los hechos de 1812 según la cual el pueblo jujeño actuó solamente por miedo y que ante la necesidad de forjar una identidad para Jujuy se construyó un “mito”, todavía hoy vigente, que poco refleja lo ocurrido hace doscientos años.
A poco de comenzar, no obstante, quedan en claro los objetivos de la producción, que nada tienen que ver con el heroico Éxodo jujeño. La dirigente ultra k Milagro Sala aparece así como centro del relato, y sin que Ipiña pudiera conectar una cosa con la otra, el objetivo de mirar el pasado desde el presente se desvanece sin remedio.
La cuarta parte, con el sugerente título de “La historia de la historia”, es el que aborda el tema del Éxodo jujeño en sí. Con voz en off del charanguista Jaime Torres, el documental hace suya la teoría de la investigadora Viviana Conti (UNJu) según la cual los jujeños actuales tienen creencias que no corresponden a lo que verdaderamente ocurrió en 1812 y que existe un “mito” en torno a esos hechos. Según Conti, la gente que acompañó al general Manuel Belgrano fueron pobres que se marcharon porque no tenían nada que perder, mientras que los sectores pudientes se habían ido antes del 23 de agosto y por pánico ante las noticias de sangrientas represiones en el Alto Perú. Con estas definiciones el guión llega sin más a la deducción que el pueblo jujeño de 1812 se movió por miedo o cobardía más que por adhesión a la causa patriota.
Valiéndose también de las titubeantes explicaciones de la directora del Archivo Histórico de Jujuy, María Morales, el documental arriba a otras conclusiones inquietantes, como por ejemplo que el Bando de Belgrano nunca existió porque “no está” y habría sido un invento del “creador de mitos” Ricardo Rojas, ante la necesidad de dar una identidad a Jujuy, la que se construyó en base a un “relato” que exaltó un dudoso heroísmo. Este “hallazgo” del Canal Encuentro, sin embargo, no resiste el menor análisis ya que si bien no ha quedado copia del Bando en el Archivo Histórico de Jujuy, se sabe de su existencia no solo por la transcripción que hizo el historiador jujeño Joaquín Carrillo en su libro de 1877 sino porque está mencionado en la correspondencia de los jefes realistas, donde se lo califica como “impío”. La historia del Éxodo Jujeño que el Gobierno provincial encargó a Conti y que se imprimió con motivo del bicentenario, incluye una copia facsimilar del documento, que se encuentra en el Archivo Histórico Nacional.
El documental pasa por alto los aspectos militares del Éxodo, sus implicancias respecto de los triunfos de Tucumán y Salta y la trascendental decisión personal de Belgrano de realizar la retirada junto a los civiles, para evitar que fueran víctimas de las represalias realistas, sabiendo el alto precio que habría de pagar la revolución si abandonaba a los pueblos en esas horas dramáticas. Tampoco analiza el significado de la bendición y jura de la bandera nacional realizada en la plaza de Jujuy dos meses antes, hecho político relevante si se recuerda que en aquel momento del proceso revolucionario, la causa patriota parecía perdida en el ánimo de los pueblos.
Pero la omisión más grave es, sin duda, la de la entrega de la Bandera Nacional de Nuestra Libertad Civil por el general Belgrano al Cabildo, cuando Jujuy es reconquistada tras las victorias de Tucumán y Salta, en mayo de 1813, y que “cierra” el ciclo del Éxodo de 1812. En una comunicación al Gobierno de Buenos Aires, el propio general dice que hizo hacer una bandera blanca con las armas de la Asamblea Constituyente para obsequiarla al pueblo jujeño, al que le encomienda conservarla con el honor y el valor que habían demostrado los hijos de esta tierra en las acciones del 24 de septiembre y el 20 de febrero. La valoración que hace Manuel Belgrano del heroísmo pueblo jujeño en este documento es un dato de la realidad y no un “mito” elaborado por la posteridad, pero no fue tenido en cuenta por Ipiña.
La “cereza de la copa” es la ridiculización de la Marcha Evocativa, conmemoración que se realiza desde hace más de cincuenta años en Jujuy, con la participación de agrupaciones gauchas de toda la provincia. Las historiadoras Viviana Conti y Gabriela Sica sonríen recordando esa marcha donde se queman ranchos de paja, van hombres “disfrazados” de gauchos y donde un día de estos –ironizan- también desfilarán ellas.
Increíblemente, en la sinopsis del audiovisual publicada en el sitio web de Encuentro, se puede leer: “Basta con que nos traslademos a Jujuy para comprobar que allí no hay mayores dudas sobre la existencia del éxodo…”. Y la expresión vale, ya que en el ir y venir del guión, se llega a sugerir que el abandono del pueblo jujeño en agosto de 1812 es sólo un “mito”.
El documental, coproducción del Canal Encuentro con la Secretaría de Turismo de Jujuy, fue cuestionado en el Senado por el legislador Gerardo Morales, quien pidió se deje de emitir durante los vuelos de Aerolíneas Argentinas. En la Legislatura, un proyecto del diputado Carlos Oehler presentado el año pasado, planteaba un repudio por considerar que se tergiversa la verdad histórica y se ofende al pueblo jujeño, pero la iniciativa agonizó en la Comisión de Asuntos Institucionales, tal vez porque uno de sus miembros, el diputado Jorge Noceti, fue quien aprobó la coproducción con el canal del Gobierno nacional cuando se desempeñaba como secretario de Turismo.
El polémico “Éxodo” sigue colgado en el sitio web del Canal Encuentro (http://www.encuentro.gov.ar/sitios/encuentro/programas/ver?rec_id=110597) y en el portal del Ministerio de Educación de la Nación, donde miles de docentes y alumnos de la Argentina entran en busca de información seria sobre nuestra historia. También podrá verse en la señal de TV, mañana, en su segunda parte a las 20,30 horas.
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