“Vamos a volver” y “Nos estamos preparando para gobernar” son algunas de las frases que más se les escucha decir a los dirigentes de Juntos por el Cambio. Las elecciones de 2023 se presentan para la principal alianza opositora como una especie de revancha, luego de lo que fueron sus complicados cuatro años de gestión, que devinieron en una derrota en las urnas. 

Pero con el Frente de Todos inmerso en una feroz interna, atravesada por las políticas económicas que no dan resultado, Juntos por el Cambio (o Juntos, a secas) empieza a entusiasmarse ante la concreta posibilidad de regresar al poder.

La victoria electoral de 2021 es un claro antecedente de que la coalición está bien posicionada de cara al próximo año, pero es cierto que para ganar la Gobernación necesita sumar una importante cantidad de votos y hacer foco en secciones electorales que podrían facilitarle esta tarea. 

Ahora, bien, si Juntos, efectivamente, regresa al Gobierno provincial, ¿tiene también posibilidades de quedarse con la mayoría en la Legislatura? 

En los comicios de 2019, María Eugenia Vidal sumó 3.852.624 votos y perdió la posibilidad de renovar su mandato al frente de la provincia de Buenos Aires. En aquel entonces, pese a la derrota, logró sumar 22 legisladores en la Cámara de Diputados (dos de ellos, luego formaron el bloque Espacio Abierto Juntos y una se sumó al Frente de Todos) y un total de 10 senadores. Y si bien dos años más tarde la coalición superó al Frente de Todos en las urnas, lo hizo por 3.480.198 votos, es decir que sacó 400.000 menos que dos años antes. Este magro resultado tuvo como consecuencia la pérdida de mayoría en el Senado, que, si hace una buena elección en 2023, puede recuperar.

Probablemente, el gobernador Axel Kicillof no logre repetir el batacazo de hace cuatro años -al menos así lo reflejan todas las encuestas-, lo que le deja el camino allanado a Juntos por el Cambio, no solo de retener el poder que tiene ahora, sino de crecer. En la Cámara Alta, la coalición renueva 10 senadores. Si consigue retenerlos y sumar apenas una banca más, el trabajo estará hecho. 

Es en las secciones Segunda y Tercera donde tiene mayores posibilidades de crecer. En el primero de los casos, si se impone en las urnas, logrará sumar, al menos, tres senadores (ahora solo pone en juego dos), mientras que en el segundo caso pone en juego tres de los nueve legisladores que elige la populosa Tercera sección electoral, el territorio más hostil para Juntos y la única región en la que perdió en 2021. Es cierto que tampoco es necesario que gane, con aumentar el caudal de votos y achicar la diferencia con el Frente de Todos, es suficiente. 

En Diputados, en tanto, Juntos necesitaría sumar siete legisladores para obtener la mitad más uno de la cámara. En 2019, la coalición había logrado meter seis diputados por la Quinta sección, pero en el bloque solo quedaron cuatro. Uno de ellos, Martín Domínguez Yelpo, abandonó la bancada y se sumó a Espacio Abierto Juntos. La otra salida fue la de Natalia Sánchez Jáuregui, quien se fue al Frente de Todos. Por la Primera sección había metido siete legisladores pero, luego de los comicios, Walter Carusso rompió y también se fue a Espacio Abierto Juntos. Entonces, si Juntos logra repetir su desempeño en esas dos secciones, solamente le faltaría sumar cuatro diputados para conseguir la mayoría; siempre y cuando después de la compulsa electoral no se le escapen más diputados.

ARMADO OPOSITOR

Los libertarios, una piedra en el zapato a la hora de repartir

El objetivo de Juntos de conseguir la mayoría parlamentaria puede verse opacado por otro factor que no es el oficialismo, sino los bloques de derecha. Actualmente, los liberales/libertarios cuentan con tres bancas: Guillermo Castello y Nahuel Sotelo por Avanza Libertad (referenciados en José Luis Espert) y Constanza Moragues por La Libertad Avanza (liderada por Javier Milei). Si bien los tres se separaron recientemente, asumieron en la Cámara Baja en un solo bloque, en línea con el escenario político a nivel nacional. 

Pero, de acuerdo a las encuestas, Espert tiene una intención de voto del orden del 11 por ciento -con proyección a crecer próximo a las elecciones-, un número que puede resultar incómodo a la hora de sacar las cuentas para el reparto de bancas. Más aún considerando que para alcanzar la mayoría, Juntos necesita siete legisladores y parte de su electorado se ve representado por el economista que está convencido de competir y arrebatarle el sillón a Axel Kicillof. 

Claro está, el desempeño de su espacio dependerá, en gran medida, de qué candidato a Presidente lo acompañe. No es un dato menor que los tres legisladores liberales recién renueven sus bancas en las elecciones de 2025, por lo que el próximo año, quienes resulten electos llegarán para sumar músculo y ejercer presión a la hora de negociar las leyes.

ESCENARIOS

Aun perdiendo las elecciones, Juntos tiene todas las de ganar

Si no llega a la mayoría, Juntos va a seguir ejerciendo presión en la Legislatura de la provincia de Buenos Aires, ya que, aunque haga una pésima elección -que es muy poco probable-, mantendrá un importante número de legisladores. Por eso, en caso de que finalmente el Frente de Todos gane los comicios en 2023 y la coalición siga siendo oposición, conservará su poderío. En las últimas elecciones legislativas el Gobierno de Axel Kicillof tenía la posibilidad concreta de alcanzar la mayoría parlamentaria, sin embargo, el electorado le dio la espalda y el oficialismo perdió en las urnas a manos de Juntos por el Cambio. 

La alianza opositora se alzó con una ajustada victoria (apenas 1,3 por ciento), pero le alcanzó para evitar que la Legislatura se tiñera de celeste. En apenas dos años, el oficialismo perdió un total de 1.906.216 votos, y la oposición, solo 400.000. En este escenario, la alianza entre el PRO, la Unión Cívica Radical, la Coalición Cívica y el Peronismo Republicano tiene todas las de ganar, ya que si repite la performance de 2021 le alcanzará, al menos, para retener lo que tiene. Si mejora, pero no gana, seguirá ejerciendo presión; y si gana, gobierna. Está claro que el desafío más próximo para Juntos en la Legislatura es intentar unificar el bloque con Espacio Abierto Juntos, actualmente conformado por Walter Carusso y Martín Domínguez Yelpo. 

La salida de los legisladores se dio en medio de la interna radical, que enfrentó en las urnas a Maximiliano Abad y Gustavo Posse a comienzos de 2021. Este año, ambos sectores dejaron atrás sus diferencias y conformaron una lista de unidad para comandar el Comité Provincia, por lo que la posibilidad de reunificar la bancada no está tan lejos. 

Desde el possismo intentaron avanzar en este sentido creando en la Legislatura bonaerense la figura de “interbloques”, estructura que funciona en el Congreso de la Nación y que les sienta cómoda a los distintos partidos que integran alianzas electorales. Por ahora fue el único gesto, pero una vez pasadas las elecciones se verá. No es un dato menor que tanto Carusso como Domínguez Yelpo deban renovar su banca a fines de 2023; si desean hacerlo deberán ir con la boleta de Juntos.