El espacio amarillo designó a quienes serán los reemplazantes de Jorge Macri y Néstor Grindetti. En abril tendrá lugar la mesa provincial de la alianza, donde se definirá el método para conformar candidaturas.
Detrás del ruido que produce la disputa interna en el PRO, incluso de los reclamos del intendente de San Isidro, Gustavo Posse, para elegir candidatos mediante internas –idea rechazada por la conducción partidaria provincial- un nuevo nivel de discusión aparece en el horizonte opositor.
Es que, como informó La Tecla.info, en los primeros días del mes próximo se reunirá la mesa provincial de Juntos, o esa es la intención de algunos de los componentes de la alianza opositora.
Esos mismos sectores creen que urge definir una forma de resolver candidaturas, y que es una pérdida de tiempo desgastante estar esperando que el PRO resuelva sus disputas a nivel nacional.
Sin fecha ni lugar definido, la posibilidad de fórmulas cruzadas no aparece ahora como una alternativa descabellada.
En principio, en la cabeza de los amarillos ronda la idea de que, junto con sus aliados de la UCR, se queden con el 70% de los lugares en las listas seccionales, reservando el restante 30% a hombres y mujeres de la Coalición Cívica y el Peronismo Republicano.
Claro está, que la pulseada será por la forma en que radicales y macristas se repartirán ese 70%. Desde el PRO creen que deberían tener la mayor parte de los lugares ya que fueron los ganadores en la PASO de dos años atrás, e imaginan que sus socios reclamarán lo mismo por tener mayor cantidad de territorios ganados. “Pero nosotros gobernamos los distritos más grandes”, replican los amarillos.
Un aspecto no menor a resolver es el cabeza de lista en caso de acordar candidaturas cruzadas. En ese caso, una de las posibilidades es que, una vez más, se utilice el resultado de 2021. “Donde ganó Santilli, que encabece uno del PRO, y lo mismo en aquellas secciones electorales en las que se impuso Manes”.
Por lo pronto, el partido que conduce Patricia Bullrich a nivel nacional ya decidió quiénes representarán la voz de los intendentes tras el paso al costado de Jorge Macri (cruzó la General Paz para ser jefe de Gabinete porteño) y de Néstor Grindetti, quien dio el portazo tras el frustrado tratamiento de la Ley Bapro, que había negociado con el jefe de Gabinete, Martín Insaurralde.
Así, dos cambios mete el PRO en su representación: ingresan la intendenta interina de Vicente López, Soledad Martínez, y el bahiense Héctor Gay, alcalde que anunció que no irá por su reelección.
Las versiones indican que el marplatense Guillermo Montenegro era una opción prioritaria, aunque declinó tal ofrecimiento. Y se habría dejado de lado, por el momento, la posibilidad de incorporar representantes de Diego Santilli y Cristian Ritondo, así como sumar al extitular de la Cámara de Diputados y aliado de Bullrich, Emilio Monzó, o al opositor boina blanca e intendente de San Isidro, Gustavo Posse.
De esta manera, además de Gay y Martínez, la mesa provincial la conforman los radicales Maximiliano Abad y Érica Revilla (presidente y vice de la UCR); Andrés de Leo y Maricel Etchecoin, de la Coalición Cívica; el senador provincial Joaquín de la Torre, del peronismo republicano y el intendente de San Nicolás, Manuel Passaglia, también de raíz peronista.
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