Venden desde medias, hasta ropa interior, pañuelitos ó productos comestibles, y a diario “invaden” la avenida Rocca en los horarios principales. Ahora también están empezando a ir a la Costanera y a eventos, como las ferias en la Plaza Eduardo Costa, donde ya han tenido incidentes con los feriantes quienes los acusaron de cometer varios robos en la modalidad “descuidistas”. 

Algunos llegan a Campana a media mañana, en tren y comienzan a recorrer la avenida Rocca, ingresando a los café y comercios, e insistiendo -por momentos de forma agresiva- a las personas para que le compren el producto que venden. 

Otros ya están “fijos” en Campana y se alojan en dos hoteles a metros del centro (uno en la zona de la Aduana y otro en la calle Alem).  

Merlo, José C. Paz, Pacheco y La Matanza, son algunas de las ciudades de origen de estos vendedores. 

“El problema es que la gran mayoría son personas con antecedentes que siguen robando y que aprovechan la venta ambulante para marcar víctimas. Por lo general, nunca están solos, actúan de a dos o tres”, señala una comerciante de la Rocca, que varias veces debió llamar a la policía. “La policía los identifica pero mucho no pueden hacer”, señala.