Por Miguel JorqueraDespués de unificarse para pelear sin suerte por una de las vicepresidencias en la Cámara de Diputados, el peronismo opositor terminó por fragmentarse detrás de cada uno de sus referentes en medio de la disputa por el liderazgo del PJ anti-K.
Compromiso Federal está compuesto por mayoría de puntanos: los diputados por San Luis Ivana Bianchi, Walter Aguilar, Sergio Panza, Nora Videla, Alberto Pérez, además del cordobés Edgar Müller y el bonaerense Alberto Asseff, que presidirá la flamante bancada. También se sumará la bonaerense Ramona Pucheta, quien llegó al Congreso en la boleta de Compromiso Federal, pero que había conformado el monobloque del Movimiento Independiente de Jubilados y Desocupados que lidera el piquetero Raúl Castells.
De sus ocho diputados, cinco tienen mandato hasta 2015, los tres restantes son sanluiseños y dos de ellos podrían renovar sus bancas en octubre si el oficialismo puntano repite el resultado de las PASO. Por lo que el bloque de los Rodríguez Saá mantendría siete bancas propias.
Después de que Compromiso Federal siguió el mismo camino secesionista del massismo, De Narváez quedó al frente del heterogéneo Frente Peronista, que conservará diez legisladores, al menos hasta el diez de diciembre. Junto al Colorado se mantienen sus diputados más fieles: Gustavo Ferrari, Natalia Gambaro y Alfredo Atanasof; además de la entrerriana María Cremer de Busti, del misionero Ramón Puerta, el reutemista Daniel Germano, el mendocino Enrique Thomas (que continuará presidiendo el bloque), el duhaldista Carlos Brown y Claudia Rucci.
Salvo Brown, el resto termina su mandato. El resultado de las PASO y los sondeos posteriores no son alentadores para las aspiraciones y las huestes del Colorado. El propio De Narváez quiere renovar su banca a la cabeza de la deteriorada alianza con Hugo Moyano. Detrás van en la lista el canillita Omar Plaini (que después de desertar del kirchnerismo armó su propio bloque con el sello partidario del camionero) y Claudia Rucci, que se alejó del padrinazgo político de Gerónimo “Momo” Venegas, para alinearse con De la Sota.
Hasta ahora, y si no logra revertir la tendencia electoral, Ferrari –el principal armador político del denarvaísmo– podría quedar afuera del Congreso. En cambio, la suerte parece menos esquiva para el misionero Puerta y la esposa del ex gobernador entrerriano Jorge Busti, que retendrían sus bancas si reproducen el resultado de las PASO.
Las expectativas del massismo están puestas en repetir y aumentar el resultado en la provincia de Buenos Aires para armar un bloque numeroso después de diciembre, ya que de los once diputados actuales del Frente Renovador sólo tres –Graciela Camaño, Alberto Roberti y Oscar Martínez (electo por el FpV)– tienen mandato hasta 2015.
Con la posibilidad de alcanzar dieciséis bancas en la elección bonaerense de acuerdo con las PASO, los renovadores pasarían a ser la bancada más importante del disperso peronismo opositor. A lo que podría sumar el módico aporte del chubutense Mario Das Neves y del díscolo gobernador santacruceño Daniel Peralta, que ya anunciaron públicamente su adhesión al massismo.
En tanto, el “cordobesismo” de De la Sota se quedaría con las bancas que sume en octubre, ya que culmina el mandato de sus dos únicos diputados. Con el ex gobernador Juan Carlos Schiare-tti a la cabeza de un bloque de cuatro, el delasotismo sería el cuarto bloque en disputa por el liderazgo del PJ anti-K.
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