“Esto es un despelote total, no lo entendemos ni nosotros”, admitió el ex intendente, para luego agregar que “hay que trata de llegar a la segunda vuelta, y para llegar a segunda vuelta hay que juntar, y para juntar hay que tragarse algún sapo”. De todos modos, Cabirón no dudo en adelantar su voto.

Pese a ser secreto, el radical dijo no tener problema en admitir que él votará a De Narváez.

“Hay que aunar esfuerzos, hay que ponerse de acuerdo sobre determinados puntos… hay que terminar con este modelo, el único modelo es el vientito de cola, todos los países de Latinoamérica han mejorado su situación”, agregó.

Ya en el ámbito local, Cabirón hizo referencia sobre candidatos propios y ajenos. Por caso, habló de Martín Salaberry. Sobre el candidato de la Unión para el Desarrollo Social (UDESO), el ex intendente dijo que “es lo que había”.

“A mí me gustaba Carlos Ocaña, un conocedor de Bahía Blanca y sus necesidades”, admitió el político. Luego, Cabirón destinó parte de sus dichos a Raúl Woscoff.

“Nos reclamaban a nosotros que en el partido seguíamos con la calesita, pero su grupo se hizo una calesita propia”, aseveró en referencia al ex radical.

También opino sobre el actual intendente de la ciudad. Sobre Cristian Breitenstein aseguró que “es el que va a ganar”. De todos modos, criticó parte de su gestión.

“No podemos discutir que no se hacen obras pero, desde el punto de vista institucional, hay un desmanejo total en la municipalidad”.

Finalmente, Juan Carlos Cabirón comentó que si bien no es candidato “uno se saca de encima nunca la política, a los que le pico el bichito, la política no se le va nunca”.