Durante la firma del acuerdo con CAPSA, el gobernador Martín Buzzi realizó una reseña del logro provincial a través de la Ley de Hidrocarburos y, con la firma de la petrolera con yacimiento en Diadema Argentina, el objetivo de que las concesiones petroleras más importantes en toda la provincia, se adecúen a la normativa chubutense impulsada por el Ejecutivo y aprobada en Legislatura en el 2012.
Dentro de la firma del contrato de concesión y de la readecuación de la empresa, el gobernador también señaló que “después de que CAPSA se avenga a la nueva ley, luego de más de cien años de trabajar bajo la antigua ley de minería, se garantiza una estabilidad laboral durante los próximos cinco años, más allá del precio internacional del crudo, lo que significa la tranquilidad para trabajadores petroleros y sus familias”.
Agradeciendo los apoyos y las gestiones del intendente Di Pierro, de Ezequiel Cufré, de Javier Touriñán y “de la asociación con Petrominera, porque hemos ido asociando a la empresa del estado provincial, logrado que esté presente dentro de cada una de las extensiones petroleras”, a los sindicatos petroleros y los gremios de Camioneros y UOCRA que “también tienen presencia en los yacimientos y que se beneficiarán con un porcentaje adicional que van a los sindicatos para infraestructura, permitiendo crear o ampliar clínicas o sedes en beneficio de todos”, el gobernador destacó también las instalaciones de CAPSA con su parque eólico y su planta de hidrógeno “la más grande de toda América Latina”.
Por otra parte, destacó que se cumplió “con una parte importante de la tarea que habíamos asumido al principio de nuestra gestión, con lo que garantizamos horizontes productivos para todos los sectores”, señalando que “en esta garantía para el trabajo durante los próximos cinco años, vamos a tener un equipo de perforación permanente, seis equipos de wor cover y dos equipos de terminación, independientemente del precio del crudo”.
Buzzi también se detuvo al agradecer a la empresa a través de su gerente, Sergio Ravello, la adecuación de la petrolera “a un marco regulatorio pese a que viene de un viejo formato de concesiones a perpetuidad otorgado en los años veinte en la vieja Dirección de Minas y Canteras, sin que tuviera ninguna obligación legal para hacerlo pero, respondiendo a la generación de relaciones de confianza, abonando un marco petrolero sano y transparente”.
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