Ezequiel Spillman

Hace diez días, antes de subirse a un avión para Nueva York, Horacio Rodríguez Larreta se acercó, a solas, al departamento que tiene Patricia Bullrich a media cuadra del Jardín Botánico, en Palermo. Charlaron por una hora sin testigos. Coincidieron en que es primordial que Juntos por el Cambio logre ganar esta reñida elección, también hablaron del temor de un quiebre del frente si se pierden los comicios y el jefe de Gobierno se comprometió a hacer campaña con ella.

En ese marco, el martes Larreta se subirá a la Patoneta, la camioneta que usa la candidata presidencial para recorrer el país. El jefe comunal recorrerá con ella el Conurbano, en especial el sur, en el trayecto que va de Lanús a Lomas de Zamora. Compartirán la clásica caravana y una recorrida juntos.

Tras las PASO, a pesar de una foto conjunta 72 horas después y diversas declaraciones en público y en privado de Larreta en apoyo a la exministra de Seguridad, muchos dirigentes venían preguntándole a Bullrich sobre el rol del jefe de Gobierno. Ante eso, la candidata respondía que venían hablando. Faltaba un paso más. Y se dará esta semana con una foto electoral.

Juntos por octubre. El jefe comunal estará con Bullrich en la camioneta emblema de la campaña. Ayer fue a Santa Fe con Pullaro. Foto: Prensa PRO

“Todos a la Patoneta” es lo que más se escucha en el segundo piso del búnker de la calle Hipólito Irigoyen, frente a Plaza de Mayo. Otros dos casos emblemáticos: se subieron a la camioneta Sebastián Abella, el intendente de Campana que arrasó en su distrito y siempre fue a Larreta, y Diego Valenzuela, de Tres de Febrero, quien trabajó con el jefe de Gobierno. Antes ya había estado recorriendo el “Colorado” Diego Santilli, el primero en ponerse a disposición de Bullrich en la Provincia.

Bullrich siente que se termina la etapa de ordenamiento de JxC bajo su figura. Un trabajo político que incluyó hasta a Mauricio Macri, quien esta semana volvió a reiterar que sus fichas juegan sobre ella. Lo hizo en Córdoba y en declaraciones públicas. Con la ayuda del coordinador de la campaña nacional, el exviceministro del Interior, Sebastián García de Luca, más el armador Damián Arabia y el jefe de campaña, Juan Pablo Arenaza, se tomó más de un mes para ir intentando recoger todas las facciones desperdigadas después de una dura interna nacional. Desde la Coalición Cívica –aunque Elisa Carrió hasta hoy no pronunció palabra alguna– hasta Margarita Stolbizer, pasando por las distintas ramas de radicales. Incluso ya los sumó a la campaña bullrichista a José Luis Espert –quien aceptó con una sonrisa– y al candidato a diputado Miguel Pichetto, quien empezó a deslizar, sin éxito, que quiere ir por el manejo de Diputados en el lugar de Cristian Ritondo.

Ahora vienen 30 días a todo o nada, pueblo por pueblo. Este fin de semana estuvo en el norte de Santa Fe –ayer con el gobernador radical electo Maximiliano Pullaro y su vice del PRO, Gisela Scaglia–, la semana que viene, además del conurbano bonaerense, tendrá un raid por Córdoba y otra recorrida por la zona centro de Santa Fe. Las dos provincias son estratégicas: creen en JxC que allí hay “votos fugados” que fueron a Milei en las PASO.

“Estamos recuperando prácticamente todos los votantes de Larreta y estamos buscando a los que no fueron a votar y a muchos que históricamente iban con JxC”, explica a PERFIL uno de los bullrichistas.

La lucha, confiesan, es hoy por entrar al ballottage y dejar al kirchnerismo con Sergio Massa a la cabeza en el tercer lugar. También observan que Milei no siguió creciendo y se muestra estancado en 32-33 puntos, suficientes para la segunda vuelta pero lejos de ganar en octubre. Por ello todos los cañones estarán puestos en “derrotar para siempre al kirchnerismo”.

Esa será la consigna central para el 22 de octubre: dejar el oficialismo atrás, tercero, y que pueda finalmente salir de la escena política en la próxima etapa del país.

Nuevo spot, con una carga contra CristinaSpot de Patricia Bullrich.

A full en campaña, ayer Bullrich lanzó un nuevo spot basado en una de las propuestas sobre seguridad que viene sosteniendo junto a su candidato a vice, Luis Petri.

En ese caso el spot se basa en la construcción de cárceles de máxima de seguridad para narcos y condenados por corrupción. En ese marco eligió, sobre el final de las imágenes donde muestra un modelo de cómo sería esa prisión si se construyera, un nombre  para la primera unidad penal: el de la vicepresidenta.

“Unidad Penal: Dra. Cristina Fernández de Kirchner”, reza el final del spot en el cual habla de la lucha contra la inseguridad, una de las temáticas donde más cómoda se siente la candidata de Juntos por el Cambio tras su paso por el ministerio durante cuatro años junto a Mauricio Macri.