Las cíclicas "caídas" emocionales del Intendente Mario Brignole esta vez mostró un contraste con un pico de "motivación" y superpoderes. Volvió a atacar a un funcionario del Gobierno Provincial.
En los últimos días los cuadros de mayor responsabilidades en el brignolismo, tuvieron asistencia a un curso sobre "motivación y liderazgo", como para empezar el año. La capacitación la dictaron dos psicólogos de la provincia de Corrientes y un Licenciado en Psicopedagogía de esta ciudad.
La cuestión es que "más motivado y altanero que nunca", Brignole dijo en una de sus tradicionales arengas al mejor estilo chavista, que "acá en El Colorado soy yo el que administra y gobierna, no como en el gobierno provincial que en la ausencia de Gildo Insfrá quien administra se cree el gobernador y hasta sueña con el cargo mientras se prueba el saco y se mece en el sillón del quinto piso".
La alusión no pudo ser más específica, y no es otro que el jefe de Gabinete del Gobierno de Formosa, Antonio Emérito "Pomelo" Ferreira, tanto que los seguidores de la gestión brignolistas aplaudieron y corearon en una carcajada al unísono, lo que hace poner más altivo al mandamás de la Perla del Sur, tal como lo hace CFK en sus cadenas de "Haló Presidenta" ante el club de reidores y aplaudidores.
La motivación lograda con ayuda psicológica evidentemente dio buenos resultados, incluso para retar y esta vez al estilo Guillermo Moreno", para que el funcionario provincial "se calce los guantes si va a venir a El Colorado". Sus dichos apuntaron más que nada a lo que fuera una velada amenaza de mandar a la arena política coloradense a "Cacho" García.
Como se sabe, el rumor del desembarco de García a El Colorado fue atribuido a una determinación que pudo haber bajado de Ferreira para molestar al sureño, restarle espacios y poder.
Ahora el "motivado" Brignole no solo salió decidido a luchar contra eso, sino además dejó ver ante sus "fieles aplaudidores" que "Pomelo" Ferreira no solo tendría habilidad para creerse gobernador en la ausencia de Infrán, sino que logró ubicar a su sobrino en la gobernación "solo por su habilidad para cebarle tereré a Gildo". Criticó que, mientras muchos profesionales tienen que rendir concursos de ingreso para ocupar espacios públicos, otros solo necesitan una fuerte influencia para lograrlo.
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