Tras varios meses de serios cuestionamientos a su labor al frente de la Policía Bonaerense, Pablo Bressi decidió ayer dar un paso al costado en la conducción de la fuerza, pidiendo el pase a retiro por “motivos estrictamente personales y profesionales”, según explicó en una carta dirigida a la gobernadora María Eugenia Vidal.

En la misiva a la mandataria, el comisario general le agradece por haberlo mantenido en el puesto, al sostener que“me confió con el cargo de Superintendente General de la Policía, siendo esta la más alta distinción a la que aspira todo efectivo de la Policía. No hay deber más necesario que el de dar las gracias, ya que la gratitud no solo es la más grande de las virtudes, sino la madre de todas ellas”.

“Concluyo así una carrera de más de 38 años, iniciada en el querido Liceo Policial, dejando saldos positivos para la institución y teniendo la tranquilidad de haber desempeñado con compromiso y honradez la función policial. Los procesos de cambio están en marcha y no tengo dudas del éxito de su gestión para el bien de nuestra sociedad”, aseguró el exjefe policial.

A pesar de las palabras escritas por el ahora exjefe policial a Vidal, se conoció que la mandataria provincial le habría exigido a Bressi apartarse de la fuerza de la forma “más decorosa posible”, de allí que se solicitara el pase a retiro sin tener en cuenta su corta edad, 50 años.

Fabián Perroni, hasta ayer el número dos de la fuerza, será su reemplazante en la conducción de la Bonaerense. Con pasos como titular de la Jefatura Departamental de las ciudades de Mar del Plata y Lanús, Perroni estuvo a cargo del Operativo Sol en la pasada temporada, calificado por el propio Gobierno como “el más exitoso de la historia”.

Relaciones peligrosas

De acuerdo a trascendidos que circularon en Casa de Gobierno ni bien se supo la noticia del apartamiento de Bressi, uno de los motivos centrales de su salida habría sido la detención de ayer del comisario mayor Alberto Miranda, jefe de Plantas Verificadoras de Automotores de la Provincia.

Miranda había sido imputado junto a Bressi y el exdirector general de Investigaciones, Jorge Pissaco (que fue pasado a retiro activo obligatorio la semana pasada), de haber comandado un presunto sistema de recaudación ilegal. 

La denuncia que consta en Asuntos Internos, y que fue presentada por un integrante de la propia fuerza, acusa a los jefes policiales de haber estafado en decenas de millones de pesos al Estado provincial a través de las verificaciones vehiculares.

La causa toca de lleno al ahora exjefe policial, ya que Miranda era una pieza clave en el andamiaje interno de la Bonaerense y uno de sus pilares a la hora de mostrar conducción. 

Cercano al exjefe de la fuerza desde que éste se encontraba al frente de la DDI de Morón, todos ellos habrían ideado un negocio espurio que le habría hecho perder al Estado grandes sumas de dinero.

Toda esta situación habría hecho desequilibrar a Bressi, quien pidió su pase a retiro al verse contra la espada y la pared, cuestionado por propios y extraños y sin ningún apoyo político al interior del gobierno provincial.

El papel de Carrió en la salida del excomisario

Según advirtieron a diario Hoy desde el propio gobierno provincial, una de las piezas claves en la salida de Pablo Bressi de la Bonaerense habrían sido las múltiples denuncias realizadas contra su persona por la diputada nacional Elisa Carrió.

La titular de la CC-ARI había acusado al exmandamás policial de ser “cómplice de los narcos”, y de haber tenido una supuesta “connivencia” con el mundo del delito, principalmente con el accionar narco y el oscuro sistema de recolección ilegal de dinero dentro de la fuerza, proveniente de la prostitución y el juego.

Pero detrás de la eyección de Bressi de la conducción de la fuerza, se esconderían también motivaciones políticas. De acuerdo a diversos trascendidos, una razón central de la decisión oficial habría sido un presunto “acuerdo” entre Carrió y el Presidente Mauricio Macri para sacar a la chaqueña de la pelea electoral porteña y alejarla de la disputa en suelo provincial.

Ese convenio entre ambos líderes incluiría una serie de pedidos por parte de la legisladora nacional, entre ellos la partida de Bressi de la Bonaerense, algo a lo que habrían accedido el jefe de Estado y la gobernadora María Eugenia Vidal, lo que habría motivado el paso al costado por parte del exjefe policial.

El mal momento de Cristian Ritondo

La salida de Pablo Bressi de la conducción de la Policía Bonaerense llegó a tener hasta algunos momentos insólitos. Mientras el ministro de Seguridad Cristian Ritondo salía en un canal de cable asegurando que “no hay decisión política de desplazar a Bressi”, en ese mismo momento el ahora excomisario anunciaba su pase a retiro a través de una carta enviada a la gobernadora María Eugenia Vidal.

El mal momento vivido por Ritondo hizo que éste se llamara a silencio tras la decisión de Bressi, al quedar mal parado públicamente por decir una cosa que era desmentida en forma inmediata por el propio implicado.

La permanencia de Ritondo en el cargo viene siendo muy cuestionada, incluso al interior de Cambiemos, por creer que no viene desarrollando una buena labor en la función pública y piden a Vidal que introduzca “grandes modificaciones” en el manejo de la seguridad provincial.