Es imposible tenerlo antes. Es un error conceptual grave pretender que haya un mapa. Vamos a discutir criterios y valoraciones y después de esa etapa llegaremos, finalmente, a un nuevo ordenamiento de nuestro bosque nativo”.

Con esta explicación, el legislador Carlos Gutiérrez, presidente de la bancada de Unión por Córdoba, salió ayer al cruce de quienes reclaman conocer el nuevo plano en el que deberán estar determinadas las diferentes zonas (“rojo”, “amarillo” y “verde”), hoy en discusión.

Alejado del apuro que mostró a finales del año pasado, cuando intentó sin éxito avanzar con la actualización de la Ley de Ordenamiento Territorial de los Bosques Nativos, UPC dice ahora no ponerse plazos para sancionar una nueva normativa, tal como lo requiere la Nación desde mediados de 2015.

La discusión sobre la polémica reforma recobró impulso esta semana en el marco de las comisiones y reuniones de bloques, de las que participaron funcionarios y técnicos de la Provincia.

Gutiérrez le dijo a La Voz que el oficialismo “no se fijó” un plazo para llevar el nuevo texto al recinto y aseguró que puso a disposición del resto de los bloques parlamentarios la asistencia técnica de los asesores.

El legislador evaluó que entre lo que plantean los ambientalistas y lo que propone el sector rural “hay diferencias enormes”. “Por eso –continuó– tienen que sumar a la discusión fundamentos de cada una de sus posiciones”.

En extensión territorial, esa brecha es de casi 1,4 millones de hectáreas. Los ruralistas pretenden pasar de los actuales dos millones de hectáreas en Categoría 1 (“rojo”) a unos 600 mil. Aducen, entre otros puntos, que en el mapa original vigente están mal categorizadas miles de hectáreas.

“Entre los extremos mediamos nosotros. Vamos a actuar de manera responsable: no avalaremos ni una cosa ni la otra. Esto sale por consenso o no sale”, aseveró Gutiérrez en línea con lo dicho semanas atrás por el gobernador Juan Schiaretti.

Además, el principal hombre de confianza del mandatario en la Legislatura fue enfático al negar la existencia de algún tipo de acuerdo entre la Provincia y la dirigencia rural, como denuncian algunos ambientalistas.

“Lo niego rotundamente. No existe ningún compromiso con los ruralistas. Es más, tenemos muchas diferencias con lo que plantea la Mesa de Enlace”, contestó ante una pregunta puntual de este diario.