El gobernador afirmó que se trata de "un hecho privado, particular, le robaron la computadora cuando venía de Buenos Aires". El ministro Galassi agregó que "cualquier especulación política es de mala fe".

El gobernador declaró esta mañana tras el acto por los 21 años de atentado a la Amia que se realizó en el Centro Cultural Roberto Fontanarrosa.

El gobernador Antonio Bonfatti desestimó hoy que el asalto que sufrió el ex ex secretario de Tecnologías de Santa Fe, Javier Echaniz, tenga relación con sustracción de documentos relacionados al gobierno. El robo sucedió hace un mes y recién trascendió hoy. 

“Es un hecho privado, particular, le robaron una computadora en su auto cuando venía de Buenos Aires. No tenía información del gobierno provincial porque toda nuestra información es pública y cualquier ciudadano puede acceder, así lo indica nuestra legislación. No escondemos absolutamente nada”, dijo el gobernador esta mañana tras el acto por los 21 años de atentado a la Amia que se realizó en el Centro Cultural Roberto Fontanarrosa.

El ex funcionario denunció que le abrieron el auto cuando volvía de Buenos Aires y le robaron 20 pen drives, una computadora y al menos un celular.

El ministro de Gobierno, Rubén Galassi, agregó que a Echaniz "le sustrajeron efectos personales y toda la información consta en la denuncia que hizo en un centro de denuncias y luego en la fiscalía. Como cualquier ciudadano en esas circunstancias, realizó la denuncia correspondiente”, señaló y sostuvo que “cualquier especulación política o partidaria que asocie ese episodio al gobierno provincial es un acto de mala fe”.

Echañiz se vio involucrado en una polémica cuando trascendió que, en su carácter de especialista en informática del Gobierno provinc ial, había manipulado la computadora personal de Luis Medina, el supuesto narco que fue asesinado a balazos junto a su novia en el Acceso Sur de Rosario el 29 de diciembre de 2013.

Además, volvió a estar en el ojo de la tormenta cuando se realizaron las elecciones Paso del 19 de abril y la provincia divulgó en forma errónea información relacionada a la cantidad de mesas escrutadas. Eso generó un escándalo y cuestionamientos hacia el gobierno que terminaron expulsando al funcionario.