En las PASO, la discusión que se planteaba era sobre quién se quedaría con la quinta banca: si el tercero del PJ (Delvis Bodoira), el segundo del Frente Progresista Cívico y Social (primero Telesco y, tras su renuncia, Miguel Rocchia), la segunda del PRO (Ana Carina Visintini) o bien el primer candidato del Frente Renovador de la Esperanza, Hernán Camusso. Esa discusión nunca se planteó en las generales y el análisis debió pasar por otro lado. 

Con un porcentaje de mesas computadas superior al 94,76% (de forma oficial) el PJ logró una importante victoria en la jornada de ayer, al conseguir 18.612 votos, lo que representa un 38,51%, una cifra similar a la obtenida en las PASO. 

Sin embargo, el cambio más grande se dio en las otras dos fuerzas: el PRO había conseguido el 18,23% en abril pasado. Su crecimiento fue terrible: casi 10%. En esta oportunidad, la lista liderada por Menossi obtuvo el 27,22%, lo que le permitió acceder claramente a la segunda banca. 

Contrariamente a esto, el Frente Progresista Cívico y Social, que había logrado 11.634, conseguía 9.449, lo que representaba el 18,54% menos. Esta merma evitó que pasaran de discutir la segunda banca a ser la tercera fuerza y tener que conformarse con adjudicarse cómodamente la primera de las bancas. 

De esta forma, lo que parecía que iba a ser una pelea voto a voto por la quinta banca, y hasta altas horas de la madrugada, terminó rápidamente, y antes de la medianoche, el pleito estaba claramente resuelto. 

EL RESTO

En cuarto lugar apareció el Frente Renovador de la Esperanza. En las PASO, todo el partido (habían competido cuatro líneas internas) había cosechado 5.877 votos y tuvo ayer una clara merma con respecto a ese puesto inicial: apenas consiguió 3.239 votos, algo así como el 6,35%. Los primeros resultados lo ponían en una posición expectante, pero las generales lo rebajaron a un lugar que lo dejó fuera de discusión rápidamente. 

En quinto lugar se ubicó el Frente de Izquierda y los Trabajadores, con la postulación de Pablo Rodríguez. En su primera experiencia electoral habían conseguido 1.277 voluntades. Pero desde abril hasta ahora, lograron incrementar su caudal, alcanzado los 2.047 votos. Un crecimiento para una fuerza pequeña, siempre es positivo.

En último lugar apareció la Nueva Propuesta Rafaelina. En las PASO había conseguido 1.484 votos. Curiosamente, y sin hacer campaña ni en los medios ni en las calles (quedaron algunos carteles colgados desde abril), su figura pública le hizo incrementar el caudal de votos, rozando casi los 2.000 votos. 

OTROS DATOS

En lo estrictamente numérico, la participación del voto en blanco y de los impugnados en esta categoría fue mínima: cada uno de ellos se llevó un poco más del 3%. Un número bastante bajo en una categoría legislativa, en donde suele haber más.