Luciano Carballo Laveglia, uno de los ganadores del domingo electoral analizó los puntos más salientes de la charla con el arquitecto que a partir del 10 de diciembre volverá al Concejo Deliberante luego de 10 años de su último paso por el deliberativo local.
Dijo Luciano: “El análisis de la elección es positivo desde todo punto de vista, primero porque supimos mantener la diferencia y fue un poco mayor que en las PASO. El segundo punto, que no es menor, porque siempre está ese mito de que después de las primarias en que competían dos listas, la suma de ellas siempre en las generales era menos, y sin embargo ahora sacamos 2.000 votos más. Esta conjunción de Juntos funcionó, la gente nos escuchó, tenía ganas de ser escuchada, fue lo que más recibimos en la calle, las ganas de hablar, creo que con la pandemia el municipio se alejó demasiado de la gente, producto del coronavirus pero también del manejo de algunas áreas”.
Carballo Laveglia reconoció que “por ahí la gente no tiene mucha noción de lo que se vota, cuál es el rol del concejal, tiene demasiadas expectativas con lo que votó, nosotros vamos a llevar las propuestas al Concejo, vamos a ser minoría, después se verá si se llevan a cabo o no; pero ya nos están pidiendo cosas”.
Luciano es precavido y sabe que “para 2023 falta mucho, porque el resultado se dio muy bien a nivel país, se ganó bien la provincia de Buenos Aires, capital, en el país, se ganó en las provincias con mayor cantidad de votantes. Hacía rato que en el comité no vivíamos un festejo con la algarabía que se dio este el domingo, un desahogo de la gente que fue expontáneo, hubo discursos bastante conciliadores. A partir de ahora la gente espera que le demos respuesta a lo que nos reclamaron y basta de críticas, seguro que vamos a criticar la gestión de gobierno; pero la gente también vio que íbamos con propuestas y no con la intención de confrontar demasiado”.
El primer concejal de Juntos agregó que “cuando dejé la concejalía en 2011 dije que no quería ocupar más cargos, siempre acompañé en todas las elecciones, cuando fue José Gabriel (Erreca), cuando fue Ricardo (Criado), no tuvieron ni que levantar el teléfono para llamarme, yo estuve a disposición, trabajé en las campañas, cuando fue Juan Carlos (Morán) también, y ya no aspiraba ningún cargo, desde que me jubilé sé que ser concejal es menos rentable porque se cobra un porcentaje de la dieta. Pero se dio y ahora hay que enfrentarlo, no me disgustó la idea, yo no lo tenía pensado; pero le tengo que agradecer a mi familia porque ellos saben que con esto les resto tiempo, como también a mi trabajo personal, a mis hobies”.
Luciano se sorprendió “por la cantidad de gente que se alegró, que me empezó a llamar, tenía muchísimos mensajes de whatsapp, en el Facebook, cosas que en otra oportunidad no pasaban; pero personalmente me alegró”.
Lucho reconoce que Juan Carlos Morán fue el ingeniero de esta campaña devenida en triunfo el domingo pasado: “Costó mucho integrar una lista de unidad para las paso, y ahí estuvo el trabajo de Juan Carlos y de Daniel Salazar, como armaron la lista era la única posibilidad de llegar a una unidad en el radicalismo, y la gente nos pedía eso. El día de la interna de marzo pasado, la gente nos decía que era la última vez que iba a vortar, nos decían que nos dejáramos de joder con las peleas, que nos juntáramos. Fue una labor tremenda de Juan Carlos, de Salazar, de Julio Ruiz y de Sergio Croce que también pusieron lo suyo”.
El arquitecto aspira a que a partir del 10 de diciembre la oposición tenga un solo bloque y no 3 como en la actualidad: “Son las expectativas que tenemos, fuimos una coalición para las elecciones, ahora tenemos que seguir siendo una coalición legislativa en el Concejo. No hablamos todavía con Ariel (Alomar) y con Pity (Quibus) para ver qué piensan sobre el bloque único; pero ya lo charlaremos”.
Este nuevo capítulo de Carballo Laveglia en el Concejo lo enfrentará con concejales que posiblemente hayan sido sus alumnos en el secundario: “Puede ser que pase eso; pero esta nueva etapa me toma con más experiencia, con sapiencia en muchos temas. Hay gente que piensa que Bolívar se creó hace 10 años, que no saben que el terreno en el que se hicieron las viviendas del Procrear al lado del cementerio fue adquirido por un gobierno radical”.
Luciano no deja de sorprenderse de algunos gestos de políticos opositores a su espacio: “Pablo Soria y Roque Gómez pasaron a saludar por el comité en las PASO, me llamó Marcos (Pisano), nos mensajeamos con Verónica Ruiz, con Patricia Unsaín, no tenía el teléfono de Diego (Freyre), era el que me faltaba pero pasó por el comité el domingo”.
Luciano entiende eso de que “el domingo festejaron todos”, porque “nosotros ganamos las elecciones pero no renovamos las 5 bancas que estaban en juego en el Concejo Deliberante, también perdemos una en el Consejo Escolar”.
El ex secretario de Obras Públicas de los dos primeros gobiernos de Juan Carlos Simón sabe que en el Concejo Deliberante había una tradición de que la presidencia del Cuerpo la tuviera el que ganaba las elecciones; pero ahora sabe que no le dan los votos para ello: “Son las reglas de la democracia, no nos dan los votos, no sé si sería justo pedirla, entrar en esa chicana de pelearnos cuando ellos tienen la mayoría. Yo soy bastante conciliador en todo esto, sería una chicana inútil. La del Consejo Escolar sí la vamos a pelear porque quedan 3 consejeros por bloque”.
Metiéndose un poco ya en su rol de concejal, al que volverá en menos de un mes, Luciano cuestionó la falta en el Ejecutivo “de una directora de Educación, hace un año que no cubren ese cargo; no tenemos directora de Discapacidad, ni secretario de Obras Públicas, y después hay otros temas a debatir como por qué la Guardia Urbana tiene 45 millones de pesos de Presupuesto, nos parece que no se condice con la prestación del servicio. La Tasa Vial es otro de los puntos a debatir”.
Luciano sabe que si bien le sirvieron de experiencia sus 8 años anteriores en el Concejo (3003-2011), fueron como concejal oficialista, y a partir del 10 de diciembre debutará en otro rol, el de concejal opositor: “Sí, y a veces las cosas las ves desde otro punto de vista, es normal”.
Y para terminar volvió a recordar y a agradecerle a su familia por el apoyo permanente: “Mi hijo no se acuerda que fui concejal, ahora cree que me van a dar la llave de la Muncipalidad, igual sabe de política, se ha interiorizado bastante; Pipi me acompañó muchísimo desde su lugar, está estudiando y me apoya; Amparo ni hablar, está estudiando abogacía, le encanta la política, es la secretaria de la Juventud, desde que tiene 10 años que me acompaña a repartir boletas, y María me ha bancado las ausencias, los fines de semana de irme, llegar tarde todas las noches, me conoció haciendo política, en 1995, hace 25 años que estamos juntos”.
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