Una nueva reunión en el Concejo Deliberante reavivó el debate sobre el transporte urbano y, más precisamente, sobre el valor del boleto en la ciudad.

En un encuentro de comisión especial, concejales de los distintos bloques analizaron la situación junto a Aoita, representantes de la Federación Universitaria de Río Cuarto, Jorge Martínez por la UNRC y María Martínez, subsecretaria de Transporte.

Quienes no estuvieron presentes fueron la CGT y CTA.

Sobre estas ausencias hizo hincapié la primera oposición y, en virtud de esto, solicitó un cuarto intermedio hasta que puedan participar todos los actores.

“Los gremios tienen posicionamientos parciales. Si gobierna un partido que no sea el peronismo, tienen una posición dura, ante cualquier tipo de aumento. De hecho, han llegado a tomar el Concejo Deliberante. Y cuando gobierna el peronismo, del cual son parte y no logran diferenciar que ellos tienen que defender a los trabajadores y no al gobierno, terminan defendiendo a la patronal y directamente no vienen a la comisión. Ni siquiera vienen a ponerle el cuerpo a sus representados”, cuestionó Gonzalo Parodi, jefe de bloque de Juntos por Río Cuarto, en diálogo con Puntal.

Sin embargo, desde el oficialismo afirmaron que fueron notificados por las centrales obreras y el motivo mediante el cual no pudieron participar ayer.

En tanto, el jefe del Frente Política Abierta, Pablo Carrizo, apuntó contra Aoita y la definió como “una representación de la patronal porque hablaba de la necesidad que tiene la empresa”.

En cuanto a lo que dejó la reunión, el excandidato a intendente dijo a este medio que no se llegó a ningún tipo de acuerdo y consideró que “lo de aumentar el boleto ya es un hecho, algo fáctico para el bloque oficialista. Lo que no dijeron que está determinado es de cuánto va a ser ese boleto”.

En esa línea se ubicó también la primera minoría, que recordó lo publicado por Puntal el domingo respecto a un aumento en dos tramos: el primero con un aumento de 28,75 a 36/38 pesos y el segundo, que llegaría en $ 42/43.

Para Parodi “es muy llamativo, para no decir que hay un acuerdo, que haya salido en los medios qué es lo que tiene acordado el oficialismo con la empresa y que ante esa situación se convoque a las organizaciones y no venga ninguna”.

“La comisión terminó siendo más un paso para avanzar en el aumento que un espacio de debate. También molesta que el intendente diga que el Concejo va a discutir el modelo de transporte y que un funcionario salga a decir a los medios cuál va a ser el aumento y en cuántos tramos”, reafirmó.

A esto, el concejal oficialista y presidente de la comisión de transporte, Miguel Alonso, respondió que esas son cuestiones periodísticas y todavía no hay nada definido ya que lo siguen analizando.

En cuanto a los tiempos, el edil comentó que si la empresa está solicitando el aumento es porque le urge en este momento.

En ese sentido, resultarán clave las próximas semanas y, quizá, abril ya comience con una actualización en el valor del pasaje.

Otro de los puntos conflictivos fueron los escasos datos que presentó la empresa sobre la estructura de costos, según la oposición.

Sin embargo, Alonso puso paños fríos al asunto cuando aseguró que, en caso de que se requiera, “se le puede solicitar mayor información a la SAT”.

¿Cómo va a votar cada bloque?

“En líneas generales el Ejecutivo dispone y sus concejales votan a favor de un aumento. Creo que todo va a concluir en un Ejecutivo diciendo cuánto y nosotros intentando que no sea tan alto el nuevo boleto del colectivo, representando otra visión ideológica en nuestro voto en contra”, adelantó Carrizo.

Mientras, en el espacio de Hacemos por Córdoba optan por la prudencia ya que es un tema sensible para los vecinos y prefieren evaluar cada paso en conversaciones con los distintos actores y la propia empresa.

La semana pasada, en declaraciones periodísticas, el jefe de bloque oficialista, Guillermo Natali, había señalado que un boleto a 50 pesos “es inviable”.

Ante la pregunta de hasta qué punto están dispuestos a acompañar en un incremento, desde Juntos por Río Cuarto responden con otro interrogante: “¿Cómo hacemos a saber lo que está bien y lo que está mal, lo que debiera pedir la empresa, si no hay documentación que acompañe ese pedido?”.

“Salvo que se empiece a debatir profundamente, en estas condiciones es casi inviable que acompañemos con el voto”, anticipó Parodi.