Era todo un tema ver a Boca sin Juan Román Riquelme después de tanto tiempo. Y el debut oficial con la ausencia tan hablada era contra Huracán en los 16avos de final de la Copa Argentina, en el estadio Bicentenario de San Juan y con varios refuerzos.

Sin embargo, el protagonista del partido fue el Globo: práctico, sin vueltas y eficaz adelante, le ganó muy bien y lo dejó afuera rápido. Tras un primer tiempo flojo de ambos y sin demasiadas llegadas, en el segundo aparecieron las emociones para el conjunto de Frank Kudelka.

En el comienzo de ese complemento, un gran pase desde mitad de cancha dejó a Ramón Ábila solo para que encare a Agustín Orión: en forma fenomenal, lo hizo y definió mano a mano para abrir el marcador. Luego, cuando el Xeneize apretaba, con una pelota parada llegó el 2-0 de Federico Mancinelli de cabeza.

El resto fue lógica pura: un Boca impotente y un Huracán simple y claro. Encima, sobre el final Hernán Grana vio la roja. Así, los de Parque Patricios están en octavos de final y el Xeneize se fue de San Juan muy preocupado... Y sin Riquelme, claro.