Finalmente, ayer se aprobaron los dos proyectos de ordenanza para avanzar con la reconversión del Basural Municipal. Mientras que la oposición (los seis ediles que se sentaron en el recinto) acompañó la normativa de rezonificación de un área cercana, votó en contra de la donación, planteando cuestionamientos y dudas respecto de la operación.  

En ese contexto, Daniel Curci Castro planteó que, “así como estamos de acuerdo con el plan global de reconversión del Basural, tenemos observaciones que no han podido ser resueltas. Nos resulta difícil de entender una donación de ese tipo. Y sobre todo nos resulta que en el expediente no está suficientemente justiciado el caso. En una quiebra, el liquidador no puede tomar por sí mismo de qué vende y a qué precio. Necesitamos ver que esté aprobado en el proceso judicial para asegurarnos de que esa venta tiene sustento”.

Además, puntualizó en varios cuestionamientos. “Una es el precio. Uno podría decir que es un precio vil. Otra es el origen del dinero, qué motivó al señor (Bruno) Migliardo para hacer una donación de esa cantidad. Y otra es que entendemos que hay vinculación de parentesco que no nos satisfacen y nos hacen sospechar”.

Por eso, solicitó “la corroboración del proceso judicial, la aprobación de la venta. Porque además el liquidador de la sociedad que firma la escritura, al día siguiente renuncia a su cargo. Todo eso nos hace dudar”.

Luego, Fernando Casset, presidente del interbloque de Juntos por el Cambio, pidió que el expediente volviera a comisión, algo que fue rechazado. En su argumentación, dijo que “cuando este expediente fue recibido en el Concejo Deliberante, en la documentación consta de que un señor Bruno Migliardo donaba a la Municipalidad tres parcelas contiguas al actual Basural. Más que donaba, celebraba una escritura ante escribano público manifestando su oferta de donación. Cuando uno la leía, por el mes de noviembre, decía que Migliardo acreditaba su propiedad sobre estos inmuebles porque el mismo día en que efectuaba la oferta de donación los había adquirido”.

En esa línea, dijo que “un documento necesario en ese expediente que era la acreditación de la titularidad sobre esos inmuebles, por parte de Bruno Migliardo, no estaba. Es más, cuando uno miraba los registros en la Dirección Provincial de Recaudación y buscaba quién era el titular, aparecía Nuevas Rutas SA”.

“Cuando alertamos de estas deficiencias del expediente -continuó Casset-, se agregó una copia simple, no certificada, de la escritura en la que constaba la compra-venta: constaba que por el valor de 50.000 dólares, Nuevas Rutas SA le había vendido esos inmuebles a Migliardo el mismo día que Migliardo hacía la oferta de donación al Municipio”.

Además, dijo que “hay otra documentación que necesariamente tiene que estar. Porque además los funcionarios en cierto viso de transparencia admitieron que esta triangulación había sido hecha porque Nuevas Rutas SA se encuentra en un proceso de liquidación por su quiebra, no podía enajenar bajo la forma de una donación capital que podía ser necesario para afrontar sus obligaciones ante sus acreedores. Si justamente Nuevas Rutas hacía como que le vendía a Migliardo para que luego donara al Municipio inmuebles que Nuevas Rutas no podía donar directamente para no restar de su capital fondos que van a servir para responder a sus acreedores, cómo no se va agregar al expediente la documentación que demuestre que el síndico y el juez están al tanto de esta operación y la autorizaron expresamente”.

El referente de la UCR detalló además que “los bienes de una empresa en liquidación, son el capital de resguardo para que se haga frente a las obligaciones de los acreedores, que son las obligaciones que justamente llevaron a la quiebra a esa empresa”.

Mientras que reconoció que “hace años que el Municipio de Luján está detrás de los inmuebles para mostrar una superficie mayor destinada a la reconversión del Basural”, recordó que “se promovió una ley provincial, por el ex diputado Juan Carlos Juárez. Que luego fue vetada con el argumento que la Provincia no tenía los fondos suficientes para hacer frente a la indemnización que correspondía al titular de esas parcelas por el régimen de expropiación”.

“Si la Provincia no tenía fondos para afrontar la indemnización, sorprende que un señor Bruno Migliardo afronte con tal liberalidad la adquisición de estos inmuebles, con el único objeto aparente y evidente de donárselos a la Municipalidad de Luján. No hay nada que nos resguarde que Migliardo o Nuevas Rutas o quien fuere en su momento no quiera hacer valer esta generosa donación para decir que tiene derecho a algún tratamiento preferencial por parte del Municipio”, alertó.

Además, dijo que “lo que nos preocupa en la enajenación de este inmueble mediante esta triangulación tan rara, además de que pueda privar a los acreedores de Nuevas Rutas del cobro de sus créditos, es que no tengo dudas de que uno de los principales acreedores de Nuevas Rutas pueda ser el Municipio. Nadie informa cuál es la deuda que tiene Nuevas Rutas por esos inmuebles por tasas municipales. Nadie informa en el expediente cuál ha sido la deuda que tenía Nuevas Rutas con el Estado Provincial por el no pago de impuestos. Nadie informa cuál ha sido la deuda con el Estado Nacional. Hay dos acreedores principales de las empresas quebradas: el Estado y los trabajadores”.

Antes de pedir que el expediente volviera a comisión, Casset sostuvo que “no son detalles. Cuando nos plantean como si estuviéramos quisquillosos o demasiados exigentes en la búsqueda que justifiquen un voto, me parece que están siendo demasiados ligeros en su propio proceder. Y no es que nos despachamos con estas cosas hoy. Saben que las venimos diciendo públicamente y en las reuniones que hemos estado trabajando este tema desde que este expediente llegó al Concejo “.

Por Agustín Gigante