Un relevamiento realizado el viernes por los panaderos cordobeses concluye que se está recibiendo muy poca harina a precio subsidiado. En consecuencia, el pan a 10 pesos llega en cuentagotas a los clientes.

El termino “cuentagotas” es, precisamente, el que utilizó Néstor Romero para describir la existencia del pan barato en el mostrador. El presidente del Centro de Industriales Panaderos de Córdoba le dijo a Día a Día que los molinos dejan las bolsas de harina subsidiada “de manera muy espaciada, lo que hace imposible que se elabore el pan acordado de manera continua”.

“Está muy tibio todo. Algunos días sí; otros, no. Estamos recibiendo espaciadamente la bolsa de harina al precio acordado de 150 más IVA”, dijo Romero.

La idea, consensuada entre panaderos y molineros a comienzos de julio, era que alrededor del 10 por ciento de la cantidad de harina vendida a cada panadería se facturara por debajo del precio de mercado. Esto es, si dejaban 100 bolsas, facturaran 90 bolsas a 260 pesos; y 10, a 150.

¿Dónde está felipe? El acuerdo, al que se plegaron los panaderos cordobeses, se traduce en que se despache pan “Felipe” (de cinco o seis piezas, similar al francés pero con más miga) a 10 pesos el kilo.

A cambio de la oferta (el pan promedia los 17 pesos en la ciudad), los molinos les iban a vender la harina más barata.

Algunas panaderías –incluso– empezaron a vender el pan barato antes de recibir la harina, a modo de promoción.

Hay que tener presente que el pan a 10 pesos no llega “a reparto”, sino que sólo se vende en los mostradores de las mismas panaderías. Es decir, no se consigue pan a “precio promocional” en despensas o quioscos. Aún en las panaderías que reciben la harina, el pan barato no alcanza a satisfacer la demanda más allá de las 10 ú 11 de la mañana.

En los supermercados. A nivel nacional también se llegó a un acuerdo con algunas cadenas de supermercados. Sin embargo, en Córdoba, casi no existe. Sólo una cadena local, que no entró en el acuerdo aún, puso una oferta por tiempo limitado que iguala los 10 pesos a los que, en teoría, debería conseguirse.

¡Pan! Para arriba.

HARINA. La “crisis del pan” empezó a comienzos de mayo, cuando el precio de la bolsa de harina trepó más del doble en pocas semanas.

PAN. En la misma proporción aumentó el pan. El kilo de francés pasó de $ 8 a 17.

COMERCIO. La Nación denunció a los molineros de “esconder la harina” para venderla más cara e impulsó el acuerdo entre la industria y los panaderos.

COMPLICADO. Ese acuerdo es el que no se logra plasmar y el pan a $ 10 casi no aparece.