La entrega de hemocomponentes es un servicio para el sector público. Los privados cobran a los pacientes cuando ellos reciben sangre gratuitamente.
La disponibilidad de hemocomponentes en el Banco provincial de Sangre, producto de la donación voluntaria, permite brindar el servicio a todas las instituciones de salud pública que lo requieran, porque así está establecido, pero desde su creación también lo hacen con el sector privado sin ganancia alguna, por tratarse de un servicio. Sin embargo, cientos de pacientes catamarqueños con o sin obra social pagan todos los insumos de los Servicios privados de Hemoterapia, sobre todo por transfusiones y colocación de otros hemocomponentes que pueden ir desde los $300 hasta los $3.000 por una transfusión.
Considerando el precio de los insumos necesarios para obtener un material de calidad y poder entregarlo, desde el Banco no descartaron implementar un convenio con las clínicas y centros privados para recuperar algunos de los gastos, ahora todo el gasto lo realiza el ministerio de Salud provincial.
En diálogo con El Ancasti, el director del Banco de Sangre, Rodolfo Bepre, dijo que la entrega es en base a los requerimientos, y que más allá de los costos no pueden cobrar nada porque está penado por ley.
"Las clínicas nos requieren porque se trata de vidas humanas, no podemos negarnos, pero los costos para obtener hemocomponentes de calidad son altísimos, por eso analizamos implementar el sistema de recupero de gasto, y se está diseñando un modelo a presentar”.
Para Bepre el objetivo del Banco es fomentar la donación voluntaria de sangre para la institución, independientemente del circuito ya que siempre "es para salvar vidas”.
"Entregamos de acuerdo con la disponibilidad, pero la prioridad siempre es la Maternidad y el hospital de Niños Eva Perón. La gente viene a donar en las campañas o por algún familiar, por eso nuestro objetivo es captar los donantes y poder brindar componentes sanguíneos de calidad porque tenemos todo para hacerlo, el Banco es un centro de complejidad”, remarcó.
Explicó que en clínicas y sanatorios lo que pagan los pacientes no es por la sangre, es por los insumos y honorarios de los especialistas.
Sin embargo, desde las obras sociales indicaron que solo las transfusiones están incluidas, mientras desde la parte privada expresaron que cuando los pacientes no llevan donantes para hacer devolución de los hemocomponentes deben abonar de forma particular.
Este circuito carente de controles por parte de organismos oficiales deja al descubierto la sobre facturación en la parte privada por un servicio que ellos reciben gratuitamente.
Por su parte, desde el Servicio de Hemoterapia del Hospital San Juan Bautista manifestaron que se autoabastece por tener un servicio completo y recibir donantes derivados, además de contar con aparatología que les permite realizar los procesos necesarios, sin tener que solicitar hemocomponentes al Banco de Sangre.
"Por razones de rapidez y por realizar campañas de donación, nosotros nos estamos autoabasteciendo, cuando nosotros necesitamos pedimos al hospital de Niños o al Banco. Trabajamos mucho con los donantes derivados, es decir que vienen por sus familiares porque donantes voluntarios tenemos uno por mes", confesaron.
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