El gobierno comunal no se sube a la ola de distintos intendentes que persiguen una autonomía para la fuerza. * La idea es impulsada por el sciolismo. "No está en nuestros planes", reconoció el jefe de Gabinete municipal, Gustavo Mena.
Gustavo Bevilacqua no está en la misma sintonía que sus colegas Jorge Ferraresi (Avellaneda), Gustavo Pulti (Mar del Plata), Lucas Ghi (Morón) y Sergio Massa (Tigre), entre otros, que procuran llevar la iniciativa a un plebiscito popular.
De hecho, el pasado fin de semana se frustró en La Feliz la posibilidad de la consulta pública, por una cuestión técnico-jurídica que se presentó a través de un amparo.
En el marco de una política cada vez más descentralizadora, el gobernador Daniel Scioli había enviado el 3 de febrero un proyecto en el mismo sentido, aunque con un manejo mixto entre el ministerio de Justicia y Seguridad y las intendencias de más de 70 mil habitantes que acepten la propuesta.
"Es invalorable a nuestro criterio contar con personal de seguridad municipal que no sólo conozca su distrito sino que, a la vez, sea conocido por sus vecinos, punto de partida para generar la confianza suficiente y el vínculo hoy roto que debemos reparar", señalan los fundamentos de la iniciativa oficial que ingresó en la Cámara de Senadores, aunque aún no fue debatida en el recinto.
Varios municipios chicos --con menos de 70 mil habitantes-- habían podido adherirse, desde 2004, a la ley de creación de policías comunales y ahora la idea del sciolismo es, de alguna manera, extender esa alternativa a los partidos más grandes.
Las discusiones que se presentan radican en la autonomía --hay intendentes que quieren absoluto dominio del servicio-- y, consecuentemente, el control de los recursos económicos.
"Utópico". Sin embargo, Bahía Blanca no ingresa en esta disputa, al menos por ahora.
"No está en nuestros planes. Por la complejidad y el esfuerzo necesarios, conformar otro cuerpo de policía es utópico para nosotros, al menos en la actualidad", reconoció el jefe de Gabinete, Gustavo Mena.
"No cerramos ninguna puerta, pero cada uno tiene que responder por lo que le compete, eso no corresponde a la Municipalidad. Si uno quiere hacer todo, no puede hacer nada", recalcó.
Durante la última reunión con el ministro Ricardo Casal, hace poco más de un mes, Bevilacqua le había exigido cumplir con la materia, recibiendo como respuesta "el compromiso de otorgar la seguridad que correspondía".
"El ministro se comprometió a respetar las competencias que le caben para brindar seguridad a los vecinos de Bahía Blanca que, por otra parte, es una manda constitucional", dijo Mena.
A su vez, destacó que la comuna aporta mensualmente "miles de litros de combustible" para los patrulleros que funcionan en nuestro ámbito.
"Nos comprometemos de cerca y de lleno con esta situación, aunque lo de la Policía Municipal no está en carpeta", aseguró, a tres semanas de la creación de la Guardia Urbana Municipal, que actúa como rueda de auxilio de la fuerza policial.
Mena consideró que la problemática de la delincuencia actual en nuestra ciudad demanda un análisis muy complejo.
"Se necesita una articulación entre las policías, el ministerio público fiscal y las justicias provincial y federal para tener más eficiencia en los procedimientos. No nos podemos explicar, más allá de cuestiones técnicas, que una persona delinca y al otro día esté libre. Tenemos que articular unos con otros y en esto incluyo a todos, a las fuerzas políticas también".
"Vemos que las fuerzas policiales no tienen los recursos que tienen que tener, que los juzgados están abarrotados de expedientes; es una responsabilidad de todos los actores. Es un sistema que no le está dando a los vecinos el resultado que reclaman de manera justa", opinó.
Se viene la escuela. En fecha a confirmar, aunque próxima --se evaluaba la posibilidad del lunes 24--, se inaugurará en nuestra ciudad, después de muchos vaivenes, la escuela de policía descentralizada, que funcionará en el predio de Chile y Undiano.
Se supone que en el acto estará presente el ministro bonaerense de Seguridad, Ricardo Casal, así como las máximas autoridades de la fuerza.
"No podría confirmar la fecha, pero estamos trabajando en los detalles finales", reconoció Mena.
La medida también busca paliar la inseguridad reinante, a partir de la recepción en nuestro medio de un importante número de egresados que, por otra parte, tendrían un mayor grado de pertenencia, ya que trabajarían en su lugar de origen.
La subcomisario Gabriela Durán, quien venía desempeñándose en la Jefatura Departamental Bahía Blanca, anteriormente había revistado en la comisaría Cuarta y fuera instructora de la academia que funcionara en instalaciones del Ejército, ya había sido designada como titular del ente.
De los 200 inscriptos de un primer momento, sólo 90 habían logrado sortear con éxito el examen de ingreso --apenas el 15% corresponde a varones--, aunque se aguardaba un nuevo reclutamiento para completar los primeros cursos.
"La tendencia mundial es al revés"
Una mirada muy crítica de la instauración de fuerzas de seguridad municipales tiene la Asociación Profesional de Policías de la Provincia de Buenos Aires (Apropoba), con sede en Mar del Plata.
El comisario inspector (RA) Miguel Angel Reynoso, su secretario general, fue uno de los que más cuestionaron el proyecto del intendente Gustavo Pulti.
"Si lo analizo como profesional del trabajo policial, veo que la tendencia mundial es al revés: mientras acá se insiste en descentralizar y atomizar las fuerzas policiales, en otras partes del mundo se va en sentido contrario", sostuvo.
Para Reynoso, la lucha contra los grandes delitos (narcotráfico, lavado de dinero, tráfico de armas y trata de personas) "no la pueden afrontar las policías locales".
"El intendente (Pulti) trajo un pseudo especialista de la policía de los Países Bajos. Allá se municipalizó en la década del '90 y cuando se dieron cuenta de que no iba, la fueron reduciendo hasta la actualidad, que tienen una sola policía nacional", explicó.
Por otra parte, Reynoso aclaró que ningún municipio puede asumir una autonomía absoluta sobre el tema seguridad salvo que se modifique la Constitución, ya que se trata de un servicio que la Provincia no puede delegar.
Consultado Reynoso sobre la situación actual y los potenciales remedios contra la inseguridad, opinó que costará recuperar un rumbo luego de la primera descentralización que llevó adelante el exministro de Seguridad León Arslanian.
"Va a costar muchos años porque la formación y la profesionalización se dejó de lado, se cerraron los centros de instrucción y, en vez de mejorar, todo empeoró. Además, el personal no quiere saber nada. Está saturado", mencionó.
En ese marco, citó el caso de los policías imputados por el homicidio del hincha de Lanús en inmediaciones del Estadio Unico de La Plata.
"Son hombres de Mar del Plata, que venían de un servicio de 24 horas, los subieron a un colectivo, los tuvieron 16 horas parados, se ducharon con agua fría y a las 13 los llevaron a la cancha, sin comer adecuadamente. En nuestro país se pone atención en el control de los choferes de larga distancia, y está bien, pero se larga a gente armada a la calle con 48 horas sin dormir", reflexionó.
Algunos aspectos del proyecto
* La Policía Municipal de Prevención (PMP) será una institución civil armada, que dependerá funcionalmente del intendente, aunque mantendrá su dependencia orgánica con el ministerio de Justicia y Seguridad provincial.
* Los efectivos cumplirán órdenes del jefe distrital, mientras que los jefes comunales diseñarán las políticas preventivas y las acciones estratégicas, que luego deberán monitorear.
* Los intendentes también realizarán los diagnósticos necesarios para su correcto funcionamiento, en atención de la realidad criminológica y la frecuencia delictiva observada.
* Estará integrada por un Centro Operativo Municipal y las distintas dependencias que determine cada una de las ordenanzas municipales.
* La designación del jefe de la policía municipal estará a cargo del intendente, a propuesta del Concejo Deliberante.
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