Su paso por la Presidencia del Consejo del PJ local, el enemigo ideológico y el respeto por el voto de la ciudadanía, son algunos de los aspectos que abordó en la nota que le concedió a LA VERDAD.
Distendido, sin presión, pero con la pasión que los dirigentes políticos de años no pierden, Héctor Azil cuenta cómo vive el proceso previo a las elecciones Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO).
Su paso por la Presidencia del Consejo del PJ local, el enemigo ideológico y el respeto por el voto de la ciudadanía, son algunos de los aspectos que abordó en la nota que le concedió a LA VERDAD.
A su vez, manifestó que Gustavo Traverso está mejor posicionado que Santiago Aguiar de cara las PASO y reconoce que Mario Meoni “en el fondo, ha hecho las cosas bien”.
- ¿Cómo vivís, ahora desde afuera, todo este proceso electoral que ya se inició en Santa Fe, Mendoza y la ciudad de Buenos Aires?
-La visión es la misma que tendría estando adentro, la diferencia es que me siento con un poco más de libertad para expresar mi pensamiento. Cuando era Presidente del Partido algunas cosas tenía que callar para no interferir en el ámbito electoral.
En todos los escenarios, local, provincial y nacional, hay un claro reparto de fuerzas en tres espacios. Hasta que no se definan las primarias no sabemos cuáles pasarán a las generales.
No hay forma de que haya mayoría absoluta y en primera vuelta se imponga una candidatura.
Lo que sí tenemos que tener en claro los peronistas, y lo digo fundamentalmente por los trabajadores, es que al momento de votar no debemos equivocarnos. Ideológicamente tenemos un solo enemigo. Podemos tener rivales, pero ideológicamente el enemigo es uno solo.
Los que vienen de la mano del PRO, esa ola amarilla que quieren imponer en todo el país, son los enemigos de la clase obrera y del peronismo. Ellos van por la destrucción de todo el entramado social que construyó el peronismo a lo largo de muchísimos años.
-Teniendo en cuenta esto que decís, ¿qué puede pasar con Petrecca?
-Esperemos que nada. En lo personal no tengo nada en contra de él. El problema es ideológico, me refiero a un enemigo que viene a destruir lo que el peronismo construyó durante 70 años.
Vuelvo a decirlo, esto no es una cuestión que tenga que ver con lo personal. Tenemos que reconocer que esa es una fuerza que en la última elección tuvo una presencia importante en Junín. Aunque no considero que sea suficiente como para que se imponga.
Dependerá mucho de lo que haga el justicialismo. Debemos dejar de pelearnos entre nosotros. No tenemos que menospreciar el voto de la gente, si la gente no nos vota por algo es. Para recuperar el voto de la gente tenemos que dar señales de que somos distintos y no eso que pensaban de nosotros.
En 2011 lo logramos, logramos concentrar los votos de las siete listas de la primaria a la general. En esa dirección tenemos que ir, la suma de pequeños sacrificios se tiene que ver en los hechos.
Yo tengo un montón de defectos pero trato de no ser necio. Me doy cuenta hacia dónde está yendo el peronismo en la actualidad, hacia un esquema de las viejas internas peronistas en las que era más importante vencer al contendiente interno que imponerse en la general. En Junín tenemos más de un ejemplo de esos.
-¿Ves con más chances a Traverso o a Aguiar?
-A Gustavo Traverso, por lo menos para ganar la primaria. Está mejor plantado, con un trabajo de base importante, más allá del desgaste de muchos años de candidatura. Tiene un grupo que lo acompaña incondicionalmente, pero también una resistencia alta. Ese pudo haber sido el freno que le impidió ser Intendente en 2011. Pero creo que hoy está mejor posicionado, aunque no hay que olvidar que acá todo es muy dinámico y de acá a que se juegue la primaria va a correr mucha agua debajo de los puentes.
-El presidente actual del PJ local me decía el otro día que el peronismo parece estar marcado todavía por lo que pasó en 1973. ¿Crees que es así?
-En algún momento pensé similar, pero pasaron tantos años... Tenemos que hacer autocrítica y asumir que las culpas son propias. Y me incluyo.
En contra de lo que pensaban muchos compañeros, que después se vieron beneficiados, yo en 2011 incluí a todos los sectores del peronismo. De hecho se terminó muy cerca de ganar una elección, el trabajo que se había hecho fue muy grande.
El peronismo tiene líneas internas muy amplias, nosotros acá pese a eso contuvimos a todos, nos abrimos y después de las primarias estuvimos muy cerca.
Yo ya no creo en el estigma del peronismo, la gente nos juzga por lo que hacemos o dejamos de hacer.
-¿Por qué Meoni está en condiciones de ir por su cuarto mandato, qué lo sustenta?
-Fundamentalmente el voto de la gente. Nunca hay que menospreciar al electorado. Hay que analizar las elecciones en vez de criticar qué vota cada uno.
En el fondo creo que ha hecho las cosas bien, lo que hay que hacer es buscar lugares por los que no haya hecho. Hay que ganarle desde las propuestas, que es lo que humildemente traté de hacer cuando fui candidato a Intendente.
La crítica personal no sirve, como tampoco sirve menospreciar al electorado. Equivocando el diagnóstico se equivocan después los caminos que se toman. La verdad es que después de tres mandatos Meoni tiene posibilidades, y posibilidades muy ciertas.
Junín es de repetir mandatos, yo soy de la idea que muchas veces se vota a quien se conoce, tratando de mejorar algunas circunstancias. Sobre todo si no se encuentra una oferta electoral del otro lado que sea superadora.
-¿Podrá Junín después de estas elecciones reforzar su participación en la IV sección electoral, estará en condiciones de sumar más legisladores fuera de la ciudad?
-¿A quién le sirve tener un diputado o un senador más? A las personas. No sé si hay que pensar en reforzar o no. El tema es quién va y con qué ambición o no. Muchas veces las construcciones que se hacen por encima de la localidad se hacen para satisfacciones personales.
A mí me interesa mi ciudad y me interesan los ciudadanos de Junín. Tengo el orgullo de decir que pasé cinco años al frente de la Presidencia del Partido Justicialista y ningún familiar mío tuvo un cargo. Como yo tampoco, ni lo tendremos. Creo que es así como debe suceder. Independientemente de la cantidad de legisladores, hay que ver qué efecto tienen esos legisladores en la ciudad.
Se pueden tener muchos legisladores llenándose de plata, que levantan la mano y que presentan pocos proyectos. Desde la política local me parece que es más cercano construir y transformar la realidad de la gente. Este es mi modo de ver, ojo no es una crítica a los legisladores. Me gusta más ver a los políticos enfocados a lo local. La gente nos elige o no pensando que vamos a aportar algo a la comunidad.
-¿No vas a extrañar nada en esta elección que vas a vivir desde afuera?
-Me siento más liberado, más tranquilo. Esa es la verdad. En ciertas circunstancias es un peso. Cada uno tiene criterios y pensamientos.
Oscar Farías el otro día me agradeció la apertura hacia todos los sectores que yo hice desde la Presidencia del Partido en su momento. Y también hacia los Derechos Humanos.
El peronismo desconocía sus propias víctimas, esa es la realidad. Hoy, además, toda la Juventud Peronista tuvo su germen en el partido en el momento en el que yo lo presidía porque les abrí las puertas. Y eso es un orgullo enorme, independientemente de los sectores desde los que estén jugando ahora. Muchos compañeros fueron testigos de problemas que he tenido por abrirle las puertas a la Juventud. Bienvenido sea, hoy ellos expresan una evolución mental que les hace entender que tienen que abrirse hacia todos los sectores, que no pueden cerrarse.
Eso es algo positivo de mi paso por el Partido. Pero extrañar, no extraño nada. Me siento mucho más liberado para elegir desde mi ideología, sin la obligación de tener que acompañar a determinados sectores porque supuestamente estarían en mi mismo espacio. Yo estoy afiliado al Partido desde 1982. Todos sabemos desde dónde provenimos en el peronismo de Junín.
Mensaje por el Día del Trabajador
“Dejo un saludo solidario a todos los trabajadores en su día. Más allá que todos nos comemos un asadito ese día, no tenemos que perder de vista que se trata de una conmemoración que hace a los derechos que ya tenemos arraigados. Pero que han costado sangre a muchos otros trabajadores a lo largo de la historia.
El 1º de Mayo conmemora todas las luchas obreras, y a quines sufrieron muertes, persecuciones y cárcel.
Sirve también para recordar que estos derechos no son permanentes. Los mismos derechos que tenemos ahora los teníamos antes. Los perdimos en la década neoliberal, los recuperamos y tenemos que cuidarlos de nuestros enemigos ideológicos. Nada es permanente, todo se tiene que sostener con la lucha de los trabajadores. Y los dirigentes, desde nuestro lugar, siempre tenemos que estar alerta y preparados. Tenemos que ser autocríticos para que no nos pase lo que ya nos pasó”.
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