Al igual que el candidato presidencial de Unión por la Patria, el gobernador bonaerense explora un acercamiento al votante de la UCR a través de los intendentes
Por Facundo Cottet
Primero fue el candidato presidencial de Unión por la Patria, Sergio Massa, quien envió señales a un sector del radicalismo para sumar adhesiones ante un eventual balotaje. Lo siguió el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof. En el oficialismo polarizan con Javier Milei y en esa estrategia buscan atraer parte del electoral que tradicionalmente responde a la Unión Cívica Radical, hoy formando parte de la estructura de Juntos y la candidatura nacional de Patricia Bullrich.
Este lunes, Kicillof puso sobre la mesa el planteo de “un (Javier) Milei, una (Patricia) Bullrich que tratan tan mal al radicalismo como movimiento histórico, como partido centenario con lo que significa en el orden democrático y la importancia que ha tenido también en determinados consensos, como Memoria, Verdad y Justicia”.
El posicionamiento va en línea con las señales que empezó a desplegar en el orden nacional el ministro candidato del oficialismo. En los últimos días, Sergio Massa también habló de hacer un gobierno “de consenso”. Lo planteó en un acto junto a los gobernadores radicales Gerardo Morales (Jujuy) y Gustavo Valdés (Corrientes); además del misionero Oscar Herrera Ahuad, que gobierna su provincia bajo el sello provincial del Frente la Concordia Misionero. Ya hubo algunas señales de dirigentes de diferentes sectores que manifestaron que ante un eventual balotaje entre el libertario y el ministro de Economía, se terminarían inclinando por el funcionario nacional.
Como contó Infobae, el giro en la campaña tiene que ver con posicionar a Massa como un candidato que entiende que el juego político de la grieta fracasó, que es necesario bajar los niveles de confrontación entre los diferentes sectores y que para que eso ocurra sería importante que haya un gobierno que rompa los límites del UP.
Kicillof también explora esta estrategia. Lo hace a través de los intendentes de la UCR, con los cuales la relación es más amena que la que mantiene con los jefes comunales del PRO. Este martes, un grupo grande de intendentes de Juntos (PRO y UCR) irán hasta la gobernación bonaerense en La Plata a dejar sentado un reclamo por fondos adeudados de parte de la gestión de Kicillof. El gobernador no va a estar. Tiene actividades programadas en los municipios de Olavarría y 25 de Mayo. “Se ve que no tienen nada para inaugurar”, chicaneó este lunes en un acto de entrega de camiones para la recolección de residuos a través del ministerio de Ambiente bonaerense y camionetas para el transporte escolar.
Ese comentario fue dirigido a los jefes comunales del PRO, que es con los que más confronta -y más en tiempos electorales- el mandatario provincial. En la gobernación bonaerense, incluso hacen una distinción entre radicales y PRO.
Este lunes fue el cumpleaños de Kicillof. Contó que recibió “muchos saludos y agradecimientos de muchos intendentes de la oposición”. Aclaró que no los nombraba “porque todavía no se ha roto la oposición”. Además buscó calar en la fragmentación de Juntos cuando aclaró: “No quiero precipitar algo, no es cuestión mía la interna”.
No es la primera vez que Kicillof intenta el acercamiento con el electorado del radicalismo. Semanas atrás participó de la inauguración del Ateneo Radical “Raúl Alfonsín” en La Plata. Se trató de un acto encabezado por el diputado nacional, Leopoldo Moreau y donde Kicillof también desplegó elogios hacia algunas concepciones del partido centenario. En ese acto se autopercibió como “parte la generación de la CONADEP y el Nunca Más”. También había contado que tenía el recuerdo de su infancia de haber participado de los actos de Raúl Alfonsín en la campaña electoral de 1983.
“Me da hasta ganas de ponerme la boina blanca..me voy a aguantar”, bromeó sobre el tradicional accesorio de los radicales. También planteó que “las y los verdaderos radicales no pueden estar en los espacios que buscan destruir la educación y la salud pública y entregar nuestros recursos energéticos”. Ese acto, sin embargo, despertó el malestar de la conducción del partido en La Plata. El presidente del Comité de la UCR en la provincia de Buenos Aires es Maximiliano Abad, primer candidato a senador nacional por la Provincia en la lista de Juntos.
Hubo, además un guiño meramente de gestión. Tras el pedido de los intendentes, Kicillof abrió un Fondo para asistir a los municipios al pago de la suma fija que dispuso Massa. Se trata de recursos reintegrables vía coparticipación. Este lunes se empezaron a firmar las primeras actas en la que los municipios acceden al préstamo. Pusieron su firma algunos intendentes no peronistas como Mariano Barroso (9 de Julio), Román Bouvier (Rojas), Lisandro Matzkin (Coronel Pringles) y Sergio Bordoni (Torquinst).
En las últimas horas, el candidato de La Libertad Avanza también ahondó en la estrategia que parece desplegar UP. Milei sostuvo en declaraciones a Radio Continental que “dos gobernadores, Gerardo Morales (Jujuy) y Gustavo Valdés (Corrientes) se sumaron a Massa. En la Ciudad, hay radicales llamando a votar a Leandro Santoro y proponiendo irse con Massa”. Un concepto que reafirmó durante una caravana por el municipio de San Martín al decir que Massa “parece que está buscando llegar a una hiperinflación”, por su acercamiento a los dirigentes radicales.
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